Rocard, ¨¢rbitro a su pesar en la guerra por la sucesi¨®n de Mitterrand

Michel Rocard se vio convertido ayer, muy a su pesar, en el ¨¢rbitro de la feroz querella sucesoria que divide a la familia mitterrandista del Partido Socialista franc¨¦s (PS). El primer ministro, que nunca ha pertenecido a la familia, ten¨ªa que inclinar de uno y otro lado el empate de fuerzas surgido del congreso de Rennes entre el ministro de Educaci¨®n, Lionel Jospin, y el presidente de la Asamblea Nacional, Laurent Fabius.

Los dirigentes del PS comenzaron en la tarde de ayer una maratoniana reuni¨®n a puerta cerrada, destinada a encontrar una f¨®rmula que impida la disoluci¨®n del partido. El resultado ser¨¢ conocido hoy.Para Rocard, la reuni¨®n de ayer en la catedral socialista de la calle Solferino supon¨ªa un aut¨¦ntico quebradero de cabeza. Tras haber sido durante dos d¨¦cadas el irreductible opositor de Fran?ois Mitterrand en el seno del movimiento socialista franc¨¦s, este hombre enemigo de los chanchullos pol¨ªticos ten¨ªa que escoger entre uno u otro de los hijos predilectos del presidente de la Rep¨²blica. El dilema de Rocard era c¨®mo hacerlo sin atraerse las iras de Mitterrand, provocar crisis de Gobierno y comprometer su porvenir de candidato a jefe de Estado.

Desde hace dos a?os, Rocard ha asumido con modestia y como inversi¨®n de futuro el papel de fiel primer ministro de Mitterrand. Rocard es el gestor de los asuntos cotidianos que deja al presidente los grandes asuntos nacionales e internacionales; el jefe discreto y trabajador de un Gobierno en el que se sientan casi todos los elefantes del PS. Tomar, partido por Jospin o Fabius significaba romper esa neutralidad.

En las v¨ªsperas de la reuni¨®n de la calle Solferino, Lionel Jospin parec¨ªa dispuesto a favorecer la creaci¨®n de una nueva corriente mayoritaria en el PS, y para ello estaba decidido a aliarse con Rocard. Su objetivo era aislar por completo a Fabius.

Fabius hab¨ªa renunciado ya al puesto de primer secretario, pero quer¨ªa para uno de los suyos el de n¨²mero dos del partido. De conseguir Jospin el apoyo de Rocard, el delf¨ªn favorito de Mitterrand quedar¨ªa en po sici¨®n minoritaria en el PS. Esa situaci¨®n llevar¨ªa al primer ministro a enfrentarse con los ocho miembros de su Gobierno alineados con Fabius.

La enrevesada situaci¨®n surgida del congreso de Rennes ten¨ªa, no obstante, ciertas ventajas para Rocard. En caso de alianza con Jospin, el eterno opositor ser¨ªa incluido por primera vez en dos d¨¦cadas en la corriente mayoritaria del PS, lo que le supondr¨ªa una buena baza para su aut¨¦ntica vocaci¨®n: ser el candidato socialista a las pr¨®ximas elecciones presidenciales.