Correr sobre el agua

Tom Jager ha consumado su sue?o: se ha confirmado como el nadador m¨¢s r¨¢pido del mundo. Nadie como este norteamericano se ha deslizado tan deprisa sobre el agua: a 8,253 kil¨®metros por hora, lo que supone para un ser humano el umbral de correr. Sus 21.81 segundos conseguidos la semana pasada en Nashville (EE UU) en los 50 metros libres superaron los 21.85 de su gran rival y compatriota, mucho m¨¢s completo, Matt Biondi (8,238 kil¨®metros por hora). El r¨¦cord mundial de ¨¦ste en los 100 libres, 48.42 segundos, equivale a una velocidad de s¨®lo 7,435 kil¨®metros por hora.

El caso de Jager es muy curioso. Jam¨¢s un nadador se hab¨ªa especializado tanto como ¨¦l. Cuando naci¨® la ¨²ltima gran prueba de la m¨¢xima velocidad, los 50 metros libres, ¨¦l casi se olvid¨® de los 100, la tradicional reina del sprint, aunque tambi¨¦n la nada y es uno de los m¨¢s r¨¢pidos del mundo. El a?o pasado, ausente Biondi, fue el tercero, con 49.85 segundos, tras el italiano Lamberti, plusmarquista y campe¨®n europeo, que hizo 49.24, y otro norteamericano, Lanu, 49.48. Su mejor marca es de 49.79.Pero a Jager, lo que siempre le ha interesado es convertirse en el m¨¢s explosivo. Y lo ha terminado de conseguir plenamente en la reuni¨®n de Nashville. All¨ª olvid¨® un poco m¨¢s aquel triste 24 de septiembre de 1988, en los Juegos de Se¨²l, donde fue derrotado por Biondi en la primera final ol¨ªmpica que se disputaba en la prueba m¨¢s corta del programa. Biondi incluso le arrebat¨®, con 22.14 segundoss, un r¨¦cord mundial que ambos disputaban fieramente desde 1985.

Su duelo con Biondi

De poco consuelo le sirvi¨® colaborar a la medalla de oro de Estados Unidos en los relevos 4x 100 metros libres y a otro r¨¦cord mundial, 3.16.53 minutos, porque s¨®lo volvi¨® a brillar Biondi, que sumaba as¨ª una m¨¢s de sus medallas. el drama personal de Jager estaba en su prueba. La historia del duelo hasta entonces hab¨ªa sido: Jager, 22.40, 1985; Biondi, 22.33, 1986 y 1987; Jager, 22.32, 1987; Jager, 22.23, 1988; Biondi, 22.14, 1988. La ¨²ltima respuesta hab¨ªa sido sonada con el eco ol¨ªmpico.Pero Jager, de 25 a?os -cumplir¨¢ 26 el 4 de octubre-, un a?o m¨¢s viejo que Biondi -que cumpie 25 el 8-, y 10 cent¨ªmetros m¨¢s bajo -1,90 metros por 2-, sigui¨® en su empe?o de recuperar el cetro. El a?o pasado, en los Juegos Panpac¨ªficos, en Tokio, nad¨® en 22.12 segundos el medio hect¨®metro. La barrera de los 22 segundos, una m¨¢s en la historia de la superaci¨®n en los deportes que se miden con cron¨®metro, era su meta siguiente.

La piscina milagro -pero siempre en la distancia ol¨ªmpica de 50 metros, no en la peque?a de 25, que permitir¨ªa un viraje ha sido la de Nashville, y por dos veces, 21.98 en sernifinales y 21.81 en la final, cuatro cent¨¦simas menos que Biondi. Y el motivo suplementario, el dinero, que ya corre libremente por la nataci¨®n, hasta ahora muy retrasada en dar espect¨¢culo cuando lo necesitaba mucho m¨¢s que el atletismo. La reuni¨®n de Nashville estaba organizada especialmente para televisi¨®n. Por eso, y por la mayor suavidad en los entrenamientos para las distancias m¨¢s cortas, la longevidad de los nadadores de elite ha aumentado en un deporte tradicionalmente joven hasta ahora.

Jager ha vuelto desde Tennessee a su ciudad, Collinsville, confirmado como el rey de la velocidad. Pero el duelo no se ha cerrado con Biondi, que ha regresado tras su retirada despu¨¦s de Se¨²l, con la mirada puesta en los Mundiales de Perth (Australia), en enero de 1991, y en los Juegos de Barcelona, al a?o siguiente.