El Gobierno de Ruman¨ªa impide la vuelta al pa¨ªs del ex rey Miguel

, Un peque?o grupo de rumanos esper¨® el jueves durante horas en el aeropuerto de Bucarest al ex rey Miguel I, pero el monarca no apareci¨®. El Gobierno del Frente de Salvaci¨®n Nacional (FSN) opt¨® por prohibir la entrada de quien se vio obligado a abdicar en enero de 1948 y aguard¨® m¨¢s de cuatro d¨¦cadas el fin del r¨¦gimen comunista en su pa¨ªs para descubrir que la entrada le segu¨ªa estando vedada. "No hay democracia en Ruman¨ªa", declar¨® el ex monarca desde el aeropuerto de Z¨²rich, al imped¨ªrsele abordar el avi¨®n.

"Es absurdo que le hayan retirado el visado. La monarqu¨ªa no tienela m¨¢s im¨ªnima posibilidad de restaurarse en Ruman¨ªa porque ninguno de nosotros la quiere. Si Miguel desea volver a visitar su pa¨ªs deben de permit¨ªrselo porque tiene tanto derecho corno cualquier otro rumano", afirma una empleada del aeropuerto.Varios centenares de personas que manifestaron a lo largo de la tarde deljueves por el centro de Bucarest gritando consignas a favor del Rey: "El Rey est¨¢ con nosotros", "no al comur.ismo", "dernocracia, libertad y elecciones libres", chillaban mientras los ni?os se acercaban a los periodistas a pedirles bol¨ªgrafos y los extranjeros en general eran acosados por numerosos cambistas.

El Rey, de 68 a?os y residente en Ver?ois, cerca de Ginebra, obtuvo un visado en el consulado rumano en Suiza para entrar en Ruman¨ªa, acompa?ado por su esposa Ana de Borb¨®n-Parma y dos de sus hijas, pero horas antes de tomar el avi¨®n en la ma?ana del jueves el Gobierno de Bucarest le retir¨® el permiso de entrada en el pa¨ªs. Un portavoz de Swissair, la aerol¨ªnea que la familia Hohenzollern hab¨ªa elegido para su desplazamiento, asegur¨® que la compa?¨ªa no era responsable de la cancelaci¨®n del viaje. "La ¨²nica responsabilidad es del Gobierno rumano", afirm¨®.

Tanto el Frente de Salvaci¨®n Nacional, como la mayor¨ªa de los partidos reaccionaron con reticencia al anuncio de que el ex rey hab¨ªa. decidido pasar la Pascua en Rumanda. Como la familia real hac¨ªa o¨ªdos sordos a las insinuaciones de que no era bienvenid¨ªa, el Gobierno le pidi¨® el martes que pospusiera el viaje hasta pasadas las elecciones del 20 de mayo.

"Mientras se desarrolla la campa?a electoral existen una situaci¨®n en la que los grupos extremistas instigan a la violencla. Cada vez est¨¢ m¨¢s claro que la visita del ex rey en este momento, puede exacerbar los conflictos existentes y poner en peligro su seguridad personal", afirma el comunicado del Gobierno. A?ade que se teme que siviene el ex rey se va a ver "implicado contra su voluntad en oscuras manipulaciones que pueden afectar a su dignidad y ensombrecer a su familia".

Tras 42 a?os de espera Miguel I est¨¢ convencido de que le aguarda la oportunidad hist¨®rica de guiar por sendas pac¨ªficas la transici¨®n de la dictadura a la democracia en Ruman¨ªa y mira al rey Juan Carlos I de Espa?a como el modelo a seguir. Sin embargo, en Ruman¨ªa su figura pol¨ªtica se ha difuminado con el tiempo y s¨®lo una minor¨ªa, sobre todo de gente de avanzada edad, cree en la resurrecci¨®n de la monarqu¨ªa. Gran parte de la poblaci¨®n est¨¢ inc¨®moda por la prohibici¨®n, ya que considera que el ex rey tiene poco porvenir y s¨ª mucho derecho a estar en su tierra.

Su hija Helen Medforth-Mills hace varios d¨ªas que se encuentra en Bucarest, a donde lleg¨® junto con un convoy de ayuda brit¨¢nica y para preparar el terreno de la visita privada de su padre. El rechazo de la ayuda que el Gobierno iba a ofrecer al ex rey durante su estancia en Ruman¨ªa es considerado uno de los factores que han contribuido a hacer estallar la tensi¨®n, as¨ª como la decisi¨®n del ex monarca de viajar a Timisoara (Transilvania), donde se inici¨® la revuelta que acab¨® con el dictador Ceaucescu en diciembre pasado y donde hace pocas semanas se han sucedido conflictos ¨¦tnicos entre la mayor¨ªa rumana y las minor¨ªas h¨²ngara y gitana.

El Gobierno tambi¨¦n se ha sentido molesto con las declaraciones del ex rey a la Prensa francesa de que lo mejor para Ruman¨ªa ser¨ªa restaurar la monarqu¨ªa constitucional. El presidente Ion lliescu, un ex comunista y uno de los que encabeza las listas electorales, afirm¨® que Ruman¨ªa ha sido, es y ser¨¢ una Rep¨²blica.