Gaddafi y los rehenes

( ... ) Es incontestable que este final feliz puede considerarse como un ¨¦xito de la diplomacia francesa. No queda ning¨²n reh¨¦n franc¨¦s en L¨ªbano. ( ... )Toda liberaci¨®n de rehenes tiene su parte de misterio. A pesar de los comunicados oficiales y de las frases hechas, el "largo y paciente trabajo diplom¨¢tico", al que hac¨ªa referencia el ministro de Asuntos Exteriores franc¨¦s, significa -o deja adivinar- m¨²ltiples negociaciones secretas manejadas por intermediarios. ( ... ) Siempre se ven acompa?adas de la gratitud hacia los Estados u organizaciones que han colaborado en este final feliz. El homenaje que Roland Dumas rindi¨® p¨²blicamente al coronel Gaddafi ( ... ) al subrayar "los esfuerzos desplegados" para obtener la liberaci¨®n de tres rehenes no hace sino confirmar la regla. Menos conformes estar¨ªamos con la alabanza que sigui¨®, al agradecer al dirigente libio su "gesto humanitario". ( ... )

Y menos habitual es que el presidente de la Rep¨²blica d¨¦ su opini¨®n sobre estas cuestiones. Al agradecer al "gu¨ªa espiritual de la Yamahiria por el impulso que ha dado y el papel determinante que ha desempe?ado en el feliz desenlace", Fran?ois Mitterrand se ha excedido de las f¨®rmulas m¨¢s usuales. ( ... )

Lo que es cierto es que Gaddafi, el pasado mes de diciembre, aseguraba que Francia era c¨®mplice del "compl¨® urdido contra L¨ªbano" y la acusaba de "oprimir a los musulmanes".

11 de abril