Gonz¨¢lez niega haber dado apoyo electoral a Roman

El presidente Felipe Gonz¨¢lez se esforz¨® ayer en demostrar que su invitaci¨®n al primer ministro rumano, Petre Roman, no supone un respaldo velado a su controvertido hom¨®logo a un mes de las primeras elecciones democr¨¢ticas que se celebrar¨¢n en Ruman¨ªa tras la caida de la dictadura. Gonz¨¢lez y su hu¨¦sped dieron ayer, justo antes de almorzar en el Palacio de la Moncloa, una conferencia de Prensa conjunta salpicada de bromas, un tanto inusitadas en ese recinto, y de muestras de su mutuo aprecio por parte de dos jefes de Gobierno que se acababan de conocer.

Nada m¨¢s tomar la palabra Gonz¨¢lez hizo hincapi¨¦ sin haber sido preguntado en que, a pesar de que los rumanos acudir¨¢n a las urnas el 20 de mayo, hab¨ªa invitado a Roman a visitarle en pleno periodo electoral porque ten¨ªa "el m¨¢ximo inter¨¦s en aprovechar el momento hist¨®rico" que vive Rumania para estrechar lazos con Espa?a.Rechazando de nuevo la acusaci¨®n, que nadie lleg¨® a formularle ayer, de interferir en la campa?a electoral en Rumania el presidente insisti¨® en que acogiendo a su hom¨®logo s¨®lo demuestra su "inter¨¦s por el pueblo rumano, no por un partido".

Roman intent¨® aportar argumentos que respaldasen a Gonz¨¢lez afirmando nada menos que el actual Gobierno de Bucarest "no ten¨ªa color pol¨ªtico" y se atrevi¨® a vaticinar que, a diferencia. de Hungr¨ªa y Alemania Oriental, la derecha y el centroderecha, que reprochan al Ejecutivo rumano por su "sectarismo", no ganar¨¢n los comicios porque, "el programa del centroizquierda es mucho m¨¢s realista". Adem¨¢s del Gobierno rumano su jefe ha sido objeto esta misma semana de duras cr¨ªticas por parte del ex disidente y actual embajador en Par¨ªs, Alexandru Paleologu, que sostuvo que "carec¨ªa de la madurez pol¨ªtica suficiente".

Visiblemente satisfecho por su buen entendimiento con Roman -Gonz¨¢lez lleg¨® a decir que ten¨ªa la impresi¨®n de conocerle desde hace tiempo lo cual "es bastante extra?o"- el presidente confirm¨® que hab¨ªa firmado con el primer ministro un acuerdo marco de cooperaci¨®n bilateral y otro para la formaci¨®n de cuadros empresariales rumanos en Espa?a al tiempo que se iba a constituir un grupo de trabajo para identificar las areas de colaboraci¨®n mutua aunque ya se vislumbran algunas.

Cooperaci¨®n cultural

Para Gonz¨¢lez Espa?a debe, sin embargo, apostar ante todo con Ruman¨ªa por "la aproximaci¨®n cultural ( ... ) porque de ah¨ª se derivan otras cosas" en materia econ¨®mica. Para ilustrar las potencialidades de la cooperaci¨®n cultural el presidente cont¨® asombrado que durante las reuniones de trabajo la delegaci¨®n que acompa?a a Roman prescindi¨® de la traducci¨®n a trav¨¦s de los auriculares y escuch¨® a sus interlocutores en castellano, una lengua latina como el rumano. "Esto es de una gran satisfacci¨®n y facilita mucho las cosas".El aprecio mutuo que se tienen Gonz¨¢lez y Roman dio pie a que se hiciesen varias bromas durante la conferencia de Prensa. Cuando se le formul¨® a Gonz¨¢lez la primera pregunta sobre la, sustituci¨®n de su ministro de Trabajo, Manuel Chaves, el huesped rumano se equivoc¨®, entendi¨® que le estaba dirigida y respondi¨®: "Me gustar¨ªa contestar pero carezco de elementos para hacerlo". "C¨®mo", fingi¨® sorprenderse Gonz¨¢lez, "si se los proporcion¨¦ todos en el coche".

Tras la pregunta sobre Chaves, Roman dijo a Gonz¨¢lez "es que usted tiene que decir el nombre del futuro ministro (de Trabajo) y entonces ya le dejar¨¢n en paz". "No crea", le respondi¨® riendose el presidente espa?ol, "lo que me preguntan es si, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, no va a haber mas cambios" en el Gobierno.