Walesa ser¨¢ reelegido hoy presidente de Solidaridad
El segundo congreso nacional de Solidaridad aprob¨® la gesti¨®n de Lech Walesa al frente del sindicato en los ¨²ltimos nueve a?os, lo que asegura su reelecci¨®n hoy, s¨¢bado, pese a las duras cr¨ªticas lanzadas por los sindicalistas radicales. Walesa acept¨® anoche presentarse como candidato a la presidencia del sindicato. El resultado de la votaci¨®n sobre su gesti¨®n fue de 357 votos a favor, 22 abstenciones y un voto en contra. El l¨ªder sindical compareci¨® ante los delegados para defenderse de las acusaciones de pr¨¢cticas dictatoriales.
El presidente de Solidaridad, quien acogi¨® el resultado de la votaci¨®n, seguida de ovaciones en su honor, con s¨ªntomas de suma satisfaci¨®n, declar¨® a EL PA?S: "No pienso luchar, pero aceptar¨¦ el cargo [de presidente del sindicato] si tal es la voluntad del pueblo [los delegados]".Walesa, contrariamente a la agencia del congreso, no present¨® ayer el informe sobre su gesti¨®n al frente de Solidaridad desde septiembre de 1981, limit¨¢ndose a una breve intervenci¨®n improvisada en la que defendi¨® sus acciones arbitrarias en la ¨¦poca clandestina de Solidaridad, al tiempo que critic¨® a los pol¨ªticos pr¨®ximos al sindicato, entre ellos; el primer ministro Mazowiecki. Walesa arremeti¨® asimismo contra aquellos miembros de la antigua direcci¨®n de Solidaridad que no se hab¨ªan subordinado a sus ¨®rdenes tras la legalizaci¨®n del sindicato hace un a?o.
Ante los ataques por "una deliberada limitaci¨®n de la democracia interna del sindicato" y "la sustituci¨®n de los estatutos por la voluntad del presidente", Walesa subray¨® su legit¨ªrn¨ªciad como presidente. "Me hab¨¦is elegido para que condujera el veh¨ªculo de Solidaridad", record¨® a los delegados y justific¨® sus decisiones "dictatoriales" alegando que tras la ilegalizaci¨®n de Solidaridad "la vida ofrec¨ªa nuevos problemas y yo deb¨ªa ir hacia adelante, haciendo virajes como un ch¨®fer".
La furia contra los "disidentes" del sindicato fue motivada por la iniciativa del "sector cr¨ªtico" de invitar a los l¨ªderes hist¨®ricos al congreso. Walesa lleg¨® a amenazar con abandonar la sala si aparec¨ªan en ellos sus antiguos colegas, Marian Jurezyk y Andrzej Gwiazda, que hoy d¨ªa intentan crear sus propias organizaciones sindicales de cariz radical-obrero. "No me voy a sentar a la misma mesa con aquellos que tantas veces me ofendieron e intentaron destruir el sindicato", gritaba ayer Walesa. El congreso no anul¨® su anterior decisi¨®n de invitar a los "disidentes".
Ataque a los intelectuales
Un sorprendente ataque dirigi¨® Walesa contra los intelectuales y pol¨ªticos pr¨®ximos a Solidaridad. En este sentido, reproch¨® al primer ministro Mazowiecki el que no apoye sus diferentes iniciativas pol¨ªticas como la demanda de la pronta retirada de las tropas sovi¨¦ticas de Polonia. El verdadero motivo del resentimiento de Walesa para con los intelectuales es la falta de apoyo de ¨¦stos a la campana propagand¨ªstica presidencial de Walesa. ?ste se quej¨® de que los intelectuales tampoco estuviesen encantandos con que fuera presidente de Solidaridad y ahora quieren que el m¨¢ximo mandatario polaco "ande vestido con frac y pajarita".
El congreso de Solidaridad aprob¨® ayer una resoluci¨®n de apoyo a la independencia de Lituania. Los delegados llamaron a todos los pa¨ªses firmantes del Acta de Helsinki a reconocer la conformidad de la declaraci¨®n l¨ªtuana de independencia con esta acta. Czeslaw Okinczyc, miembro de la comisi¨®n de Exteriores del Parlamento lituano, declar¨® ayer que el primer ministro polaco, Tadeusz Mazowiecki, le prometi¨® que dar¨ªa a Lituania "toda la ayuda econ¨®mica que est¨¦ al alcance del Gobierno polaco".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.