Instituci¨®n necesaria

Cuando en abril de 1984 mor¨ªa en Nueva York William Count Basie dejaba tras de s¨ª una gran banda que hab¨ªa funcionado de manera estable desde 1935, un temario con decenas de piezas que hab¨ªan hecho bailar a la juventud de sus d¨ªas y una colecci¨®n de arreglos que hicieron ¨²nico el estilo de la orquesta. Con Basie estuvieron muchos de los mejores instrumentistas de cuatro d¨¦cadas del jazz y tambi¨¦n Billie Holiday, que ganaba al p¨®quer a toda la banda. Desde la muerte del l¨ªder han sido varios los intentos de seguir con la instituci¨®n -Basie Men, Basie Alumni-, y la actual Orchestra, bajo la direcci¨®n de Frank Foster, se presenta como un nuevo ¨¦xito en esta empresa.Puede entenderse, de partida, que en Madrid, en 1990, no vamos a encontrar la misma banda que mandaba en la noche de Kansas City, en el Reno Club, mediados los a?os treinta, y tambi¨¦n que no estamos jugando a ninguna clase de revival: lo que ah¨ª hay es mucha m¨²sica, y m¨¢s vale que sea interpretada, y por estos hombres, algunos decanos de los a?os legendarios de la orquesta y j¨®venes m¨²sicos que saben que no hay mejor homenaje al maestro que jugarse el cuello en cada solo.

Una buena alianza de sabidur¨ªa y ganas de tocar hacen que la actual Orchestra se presente desde el primer momento como perfectamente cre¨ªble, viva. Basie fue un maestro de los arreglos improvisados en el estudio o sobre el escenario, pero tambi¨¦n supo contar con arreglistas que consolidaron la capacidad de explosi¨®n en¨¦rgica de la banda. Por eso hoy puede seguir sonando como un organismo vivo y no como una visita al museo de lo que ya es historia.

Treinta y siete son los a?os saxofonista Frank Foster ha estado en casa Basie y tamb?¨¦n uno de sus arreglistas. ?l debe ser el principal responsable la m¨²sica Basie no se pueda escuchar sin mover los pies.

En la secci¨®n r¨ªtmica, que con Basie siempre fue una orquesta dentro de la orquesta, destacan el pianista Carl Carter, con la ambici¨®n del respeto, y el baterista Duff Jackson. Con el guitarrista Charlton Johnson y el contrabajista Cleveland Eaton logran el exacto cl¨ªmax. Las tres secciones de metales est¨¢n nutridas de maestros de entonces y de disc¨ªpulos confirmados, y en sus solos se expresan tambi¨¦n en el recuerdo de algunos de los que estuvieron en la orquesta, de Lester Young a Lockjaw Davis, a Freddie Geene, a Frank Foster, por ¨¦l mismo. Tambi¨¦n la cantante, Carmen Bradford, pudo mostrar que estaba m¨¢s cerca de Joe Williams que de una irrepetible Billie Holiday.