Los democristianos ganan las regionales italianas

Los primeros resultados parciales, pero casi definitivos, de las elecciones regionales celebradas el pasado domingo y ayer en Italia han supuesto un descalabro para los comunistas y han confirmado a los democristianos como primera fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs. El Partido Socialista Italiano (PSI) y los verdes han aumentado ligeramente su porcentaje; las ligas o listas regionales antirromanas, que en Mil¨¢n han superado al PSI, coloc¨¢ndose con un 20%, como tercer partido regional, han experimentado un significativo aumento. Estaban convocados a las urnas 46 millones de italianos en 15 regiones del pa¨ªs.

Se trata s¨®lo del resultado de las elecciones regionales, ya que el de las municipales -tambi¨¦n celebradas el pasado domingo y ayer- no se conocer¨¢ hasta esta tarde; en consultas anteriores, el porcentaje de votos obtenido por los partidos en la regi¨®n y en el municipio no se diferenci¨® mucho.?sta fue la vigesimosexta vez que -en 42 a?os de rep¨²blica- los italianos acudieron a las urnas en unas elecciones de car¨¢cter nacional; una media de una elecci¨®n cada 17 meses. Y fue la vez en que ha habido mayor porcentaje de abstenci¨®n, ya que ¨¦ste super¨® el 20%. En algunos lugares, como en la bella ciudad siciliana de Taormina, ayer por la ma?aria los responsables de los partidos salieron a la calle, como anta?o, con coches y altavoces para suplicar a la gente que votara.

Todos los observadores hab¨ªan dado, antes de la consulta, un valor netamente pol¨ªtico a estas elecciones administrativas y municipales, por el momento en que se celebraban. Las tres inc¨®gnitas de las; elecciones eran los resultados que obtendr¨ªan las ligas regionales, el PCI y la Democracia Cristiana. Este ¨²ltimo partido no pod¨ªa airear en la campa?a el espantap¨¢jaros del miedo al comunismo, tras la radical transformaci¨®n iniciada en el seno de esa fuerza pol¨ªtica encabezada por el secretario general Achille Occhetto.

Avance de las ligas

Las ligas regionales han obtenido el respaldo del 5,7% de los votantes en todo el pa¨ªs pero, trat¨¢ndose de un fen¨®meno t¨ªpico del norte italiano, es en esa zona donde han conseguido un avance espectacular. De hecho, en Mil¨¢n se han colocado, con un 20%, como el tercer partido de la regi¨®n, haciendo pr¨¢cticamente imposible ahora la formaci¨®n de un Gabinete pentapartido (alianza de las cinco formaciones pol¨ªticas que gobierna en el pa¨ªs) o de izquierdas.

Por lo que se refiere a la Democracia Cristiana, aunque esta vez ha tocado su m¨ªnimo hist¨®rico -con el 32% de los votos- sigue siendo, sin embargo, y con mucho, el partido de mayor¨ªa relativa del pa¨ªs, el centro de la pol¨ªtica y el eterno democristiano, como se?alan los observadores. Lo curioso es que dicho resultado lo ha obtenido la DC sin el miedo de los electores al Partido Comunista Italiano y a pesar del avance de las ligas auton¨®micas. Al tener ¨¦stas un car¨¢cter derechista, se pod¨ªa suponer que iban a quitarle votos sobre todo a la DC; pero, en realidad, han ido a robar apoyos sobre todo a los comunistas.

El partido de Occhetto

En efecto, el partido m¨¢s castigado en estas elecciones ha sido el de Achille Occhetto, que apenas ha obtenido el 23%, perdiendo un 7% con respecto a las ¨²ltimas regionales de 1985,y un 5% con relaci¨®n a las europeas del a?o pasado, cuando hab¨ªa alcanzado ya su m¨ªnimo hist¨®rico.

Los mismos comunistas, aunque siguen siendo el primer partido de la izquierda en Italia y el segundo en el conjunto de las fuerzas pol¨ªticas del pa¨ªs, han considerado el resultado "descorazonador", y, si se confirmase que obtienen un porcentaje similar en las municipales, ma?ana por la tarde, ello podr¨ªa crear problemas al proyecto de Ocehetto de abrir una fase constituyente en el PCI.

Por lo que se refiere a los socialistas, que ha obtenido un 15%, y a los verdes, un 5,5%, son los dos ¨²nicos partidos que han aumentado sus votos en relaci¨®n con las tres ¨²ltimas elecciones nacionales, pero, como siempre tambi¨¦n, se ha tratado esta vez de un aumento muy lim¨ªtado que en realidad deja las cosas como estaban.

En efecto, el que podr¨¢ ahora tener suenos tranquilos es el eterno Giulio Andreotti, el primer ministro democristiano, al haberse mantenido los votos del pentapartido; esta coalici¨®n ha obtenido de nuevo un 56% abundante, sumados los resultados de la DC y del Partido Socialista Italiano (PSI), e Partido Republicano Italiano (PRI), el Partido Socialdem¨®crata Italiano (PSDI) y el Partido Liberal Italiano (PLI).

La alternativa de izquierda

Ello har¨¢ muy dif¨ªcil, por no decir imposible, afirmaban ayer un¨¢nimemente los observadores, cualquier hip¨®tesis de alternativa de izquierdas durante mucho tiempo en este pa¨ªs, ya que, en conjunto, la izquierda ha perdido un 3% de los votos. Tambi¨¦n empujar¨¢, sin duda, de nuevo al l¨ªder socialista, Bettino Craxi, a continuar su alianza con la Democracia Cristiana, al igual que los otros partidos menores; todos ellos no tendr¨¢n ahora ning¨²n inter¨¦s en trasladarse a los lares de un Partido Comunista Italiano al que el cambio radical a que est¨¢ siendo sometido no le ha favorecido en esta consulta electoral, en la que ha sido castigado duramente.

Al mismo tiempo, el eslogan propugnado por Occhetto en estas elecciones -"acabar con la Democracia Cristiana" como partido hegem¨®nico del pa¨ªs- se ha revelado in¨²til y hasta negativo para el secretario comunista.