Un corrid¨®n
Puerto / Bernad¨®, Fundi, Cu¨¦llarCinco toros de Puerto de San Lorenzo y 62, segundo sobrero, de Manuel S¨¢nchez Cobaleda, de gran trap¨ªo y cornalones, flojos, con sentido. Joaqu¨ªn Bernad¨®: cinco pinchazos bajos -primer aviso, con retraso-, cinco pinchazos m¨¢s, media descaradamente baja -segundo avisoy dobla el toro (algunos pitos); dos pinchazos, otro hondo atravesad¨ªsimo, pinchazo y se acuesta el toro (pitos). El Fundi: pinchazo bajo, bajonazo escandaloso y descabello (algunos pitos); espadazo baj¨ªsimo enhebrado y descabello (bronca). Juan Cu¨¦llar: estocada corta trasera ladeada (silencio); estocada corta tendida descaradamente baja (silencio). Plaza de Las Ventas, 18 de mayo. Octava corrida de feria. Lleno de "no hay billetes".
JOAQUIN VIDAL
Para los modestos soltaron un corrid¨®n de toros y anduvieron los pobres, de sobresalto en sobresalto. Bueno, alguien dir¨¢ que a las figuras tambi¨¦n les han soltado torazos, adem¨¢s del mismo hierro, Puerto de San Lorenzo, y no anduvieron de sobresalto en sobresalto, todo lo contrario: animosos antes bien, relajados ce?idos. Hasta una figura de esas fue capaz de cortarle la oreja a uno de los torazos del Puerto de San Lorenzo, ni cinco d¨ªas hace del acontecimiento.Dicho as¨ª, la cosa est¨¢ clara las figuras son figuras porque pueden con todo, inclu¨ªdos lo toros del Puerto de San Lorenzo los modestos, modestos, porque no pueden con nada, ni siquiera con los toros del Puerto de San Lorenzo. La coartada es perfecta, si no se profundiza. Porque si se profundiza, se ver¨¢ que los toros del Puerto de San Lorenzo que les sacaron a las figuras nada ten¨ªan que ver con los que les sacaron a los modestos. Los toros del Puerto de San Lorenzo de las figuras eran bombones para el triunfo, y los de los modestos, fieras corrupias para el fracaso.Los modestos no tuvieron posibilidad de redenci¨®n ni con el sobrero, que a¨²n siendo de otra ganader¨ªa, sali¨® igual de cornal¨®n, o m¨¢s, igual de resabiado, o m¨¢s. Es decir, que as¨ª como para las figuras hasta los sobreros se buscan con nota, para los modes tos se buscan sin nota alguna y all¨¢ se las compongan.
Fracasaron los modestos, naturalmente, lo cual no significa que renunciaran a torear. Oh, s¨ª, Joaqu¨ªn Bernad¨® renunciaba Pero Joaqu¨ªn Bernad¨® no es torero modesto ni inmodesto; es un veterano largo tiempo inactivo que a sus 54 a?os se desped¨ªa de la afici¨®n madrile?a, y nadie con un m¨ªnimo de consideraci¨®n le iba a pedir que se dejara en el empe?o las femorales. Desde luego, no cay¨® en la tentaci¨®n de dej¨¢rselas, ni en el empe?o, ni en el desempe?o: traste¨® a prudente distancia de los pitonazos temerosos, mat¨® por mensajero.
En cambio los otros dos modestos, que no hab¨ªan nacido siquiera cuando Bernad¨® iba de figura por las ferias (desde entonces ya ha llovido), s¨ª arriesgaron lo que permit¨ªa la cordura. Es decir, que intentaron insistentemente darles pases a sus dos toros, y claro que se quitaban de en medio cuando los toros se les revolv¨ªan o derrotaban al bulto: no se iban a quedar all¨ª plantados, en plan Don Tancredo.
Del quinto toro se enamor¨® parte de la afici¨®n porque acudi¨® de largo al caballo. Luego cabeceaba el peto, no se crec¨ªa al castigo, acab¨® violento, mas eso de ir largo al caballo otorga patente de bravura, al parecer, y cuando feneci¨® de horrendo mandoble enhebrado, pidieron que se le diera la vuelta al ruedo. "?Vaya toro te has dejado ir!", le gritaron al Fundi, responsable del mandoble. Muchos en la plaza opinaban que ese toro, y todos, habr¨ªan tenido faena, si los llega a coger otro torero. Seguramente es cierto: los coge uno con el valor del Espartero, la t¨¦cnica lidiadora de Joselito el Gallo y el temple de Belmonte, y les corta la oreja. Lamentablemente ese no era el caso de Bernad¨®, ni de El Fundi, ni de Cu¨¦llar. A lo mejor son las figuras las que tienen el valor del Espartero, la t¨¦cnica de Joselito y el temple de Belmonte. Hagamos la prueba: p¨®ngaseles con un corrid¨®n como ese, y se ver¨¢ lo que es bueno.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.