La vigilancia al 131 desplaza a los toxic¨®manos a la ruta 130 para comprar sus dosis en La Celsa

La presencia de dos coches patrulla de la Polic¨ªa Municipal que vigilan el recorrido de la l¨ªnea 131 de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), para evitar las agresiones y amenazas que sufren los conductores de esta ruta por parte de un sector de los viajeros, ha motivado el desplazamiento de buena parte de los toxic¨®manos que utilizaban esta l¨ªnea de transporte para acercarse a adquirir su dosis en el punto de distribuci¨®n de droga conocido como el Rancho del Cordob¨¦s, a la ruta de autob¨²s 130. Esta l¨ªnea les lleva a otro lugar de venta de estupefacientes situado en el barrio de La Celsa, seg¨²n manifestaron ayer conductores que cubren este trayecto.La direcci¨®n de la Polic¨ªa Municipal puso en marcha el viernes 4 de abril un programa experimental de vigilancia de la zona de influencia de la l¨ªnea de autob¨²s 131, despu¨¦s de que los 40 ch¨®feres que cubren esta ruta exigieran protecci¨®n ante los constantes intentos de agresi¨®n y amenazas de que son objeto en el ejercicio de su trabajo por pasajeros que se niegan a pagar el billete o que utilizan el veh¨ªculo como lugar donde inyectarse las dosis de hero¨ªna que acaban de comprar en el Rancho del Cordob¨¦s, frente al cual se sit¨²a una de las paradas del itinerario del 131 entre Aluche y Villaverde.

'Emigraci¨®n'

Seg¨²n los conductores de esta l¨ªnea, desde el inicio de este programa de vigilancia, que, seg¨²n el jefe de servicio de la Polic¨ªa, Monteagudo, se mantendr¨¢ durante un mes para adoptar despu¨¦s las medidas oportunas seg¨²n las incidencias observadas, se ha notado una cierta "emigraci¨®n" de los drogadictos que tomaban este autob¨²s hasta el Rancho del Cordob¨¦s "a la l¨ªnea 130, que tambi¨¦n pasa por otro punto de venta de droga"."Si antes sub¨ªan 100 personas a comprar hero¨ªna en el Rancho ahora suben 50, y el resto utilizan el autob¨²s 131 para llegar a la parada del Puente de Alcocer, donde enlazan con la ruta 130, con la que llegan finalmente a su destino en el domicilio de otros camellos en el barrio de La Celsa", afirma un conductor de la l¨ªnea 131, quien a?ade: "Lo ¨²nico que se ha conseguido con la vigilancia es trasladar a los viajeros conflictivos de una ruta a otra aunque tampoco se ha logrado garantizar la seguridad de ¨¦sta.

Este ch¨®fer denunci¨® la noche del jueves un intento de agresi¨®n con un cortaplumas que sufri¨® cuando un viajero le increp¨® por solicitar a su compa?era la presentaci¨®n del abono transporte que la chica dec¨ªa no encontrar.