Boni: "Soy el nuevo Ruiz Miguel, pero en rubio"

Rafael Perea Boni se ha ido de la feria sin el triunfo que buscaba, aunque su ¨¢nimo era bueno al t¨¦rmino del festejo de ayer: "No desmerec¨ª en ninguna de las dos tardes, porque los toros fueron dif¨ªciles, que son los que me esperan a lo largo de la temporada. Muy a mi pesar, soy el nuevo Ruiz Miguel, pero en rubio".El diestro explicaba que le han encasillado en este tipo de corridas porque hay pocos compa?eros que quieran torearlas: "Los empresarios no se las ofrecen a las figuras porque saben que las van a rechazar, ni a otros m¨¢s modestos por si acaso no les pueden. Retirado Ruiz Miguel les quedan pocos recursos y entre ellos, Boni".

Criticaba al p¨²blico de Madrid, al que ve¨ªa muy cambiado con ¨¦l respecto a 1989. Pese a ello estaba contento de c¨®mo lidi¨® a sus enemigos: "Llevaban un peligro sordo, que tal vez no se supo ver en los tendidos. Al ¨²ltimo le tor¨¦e con el capote rodilla en tierra, y despu¨¦s le extraje a base de exponer unas series de m¨¦rito. Y la gente sin enterarse".Jos¨¦ Luis Bote brind¨® su primer toro al cirujano Carlos Val Carreres, que le oper¨® del ri?¨®n en Zaragoza, tras las graves complicaciones que le surgieron como consecuencia de la cornada que sufri¨® en el pasado mes de agosto en Benidorm. "Lo hice porque casi me salv¨® la vida", explicaba, "y no porque el toro fuera bueno. Al contrario, mi lote ha salido con peligro, embistiendo con la cara alta y par¨¢ndose".Para Bote, lo mejor del festejo fue su naturalidad en la cara del toro, y lo peor la frialdad del p¨²blico con los diestros. Val Carreres, que vino expresamente desde Zaragoza a ver la reaparici¨®n del torero, expresaba tras el brindis su admiracion por Bote: "Un ejemplo como paciente y como persona", y se lamentaba del mal juego deltoro.

Oliva se lo hab¨ªa tomado con filosof¨ªa: "Frente a estos animales s¨®lo te queda la opci¨®n de estar digno y matarlos". Agregaba que su primero fue el ¨²nico noble pero que no transmit¨ªa: "Le d¨ª pases buenos, que no se valoraron en su medida". Al otro lo calificaba como un marmolillo. "Estoy satisfecho", conclu¨ªa, "porque he mostrado mi nueva imagen, con tranquilidad, sosiego y acertando con la espada".

La mejor clientela

Eduardo Lozano, un¨® de los empresarios de Las Ventas, estima que los aficionados del tendido siete son sus mejores clientes porque, pese a las protestas, nunca faltan a la cita: "Ojal¨¢ todos los comerciantes tuvieran asegurada siempre una amplia clientela fija para sus productos".

Al empresario no le preocupan los gritos que profieren esos aficionados en favor de la autenticidad del espect¨¢culo: "Pero si yo me r¨ªo mucho con algunas de sus frases, que tienen mucha gracia". Lozano, que asegura mantener buenas relaciones con los aficionados de ese sector, les califica de exigentes: "Hacen bien en protestar lo que no les gusta porque para eso pagan. Es m¨¢s, si yo fuera espectador sacar¨ªa mi entrada de ese tendido.