El regreso del pr¨ªncipe
Prince presenta en Rotterdam el espect¨¢culo que ofrecer¨¢ en Espa?a a finales de julio
Prince ha iniciado su esperada nueva gira europea. El pasado fin de semana, con dos recitales en la ciudad holandesa de Rotterdam, a los que asistieron m¨¢s de 75.000 personas, ha vuelto al primer plano de la actualidad musical, despu¨¦s de un largo periodo de silencio. Durante los meses de junio, julio y agosto, el cantante norteamericano ofrecer¨¢ 42 recitales en el Viejo Continente, tres de los cuales se celebrar¨¢n en Espa?a coincidiendo con la publicaci¨®n de su nuevo disco, Graffiti bridge. Prince actuar¨¢ el d¨ªa 22 de julio en Madrid; el 24, en Valencia, y el 26, en Barcelona.
En la presentaci¨®n de la gira de Prince en Rotterdam todo han sido problemas. Despu¨¦s de varios aplazamientos debido a la grabaci¨®n de su nuevo disco, la lluvia hizo su aparici¨®n en las horas previas a los dos conciertos inaugurales. El estadio de f¨²tbol utilizado habitualmente por el Feyenoord vest¨ªa galas de color negro y naranja. Las primeras, instaladas en honor del pr¨ªncipe, y las segundas colocadas como apoyo a la selecci¨®n holandesa, la naranja mec¨¢nica.Ca¨ªa una fina llovizna cuando pasaban 15 minutos de las nueve de la noche y apareci¨® ante el p¨²blico europeo el m¨²sico norteamericano m¨¢s innovador de la ¨²ltima d¨¦cada. Prince luce hoy barba de tres d¨ªas, pelo largo y desali?ado, pantalones ajustados y camiseta negra. Comenz¨® contorsion¨¢ndose en una danza constante, acompa?ado por tres bailarines, y s¨®lo unos segundos despu¨¦s desnud¨® su pecho ante el entusiasmo de un p¨²blico pasado por agua. Tras ¨¦l, cinco m¨²sicos. Voces distorsionadas y efectos extra?os, mezclados con abundante niebla artificial, dieron paso a la primera canci¨®n, una version funk de 1999. Despu¨¦s llegaron Kicks, Housequake y Sexy dancer, como aperitivo de lujo para una desgarradora interpretaci¨®n de Purple rain. En este tema el cantante y compositor de Minne¨¢polis se qued¨® solo en el centro del escenario, cubierto con una amplia t¨²nica blanca y con la ¨²nica compa?¨ªa de su guitarra el¨¦ctrica de dise?o futurista Durante siete minutos de gran intensidad y belleza, Prince se mostr¨® como un instrumentista s¨®lido y un artista amplio, enemigo de la mecanizaci¨®n excesiva de su m¨²sica.
"Tengo una nueva banda", dijo tratando de justificar su soledad. Acto seguido presento a los cinco m¨²sicos que le van a acompa?ar por todo el mundo: Miko Weaver (guitarra), Levi Seacer, Jr (bajo), Dr. Matt Fink (teclados), Michael Bland (bater¨ªa) y Rosie Gaines -"la nueva Aretha Franklin", dijo Prince- (teclados y coros).
Suavidad
Buen guitarrista, amigo de crear ambientes y puntear con cadenciosa suavidad, Prince no dud¨® en sentarse al piano para buscar un intimismo dificil de encontrar ante casi 50.000 personas. Las luces y la coreografia se ajustan a su actual idea del espect¨¢culo: tonos oscuros y bailes continuos; sin trucos ni cartones, s¨®lo con un par de escu¨¢lidas pantallas laterales de v¨ªdeo y buen gusto a la hora de planificar el concierto.Prince ha sacrificado el contacto con el p¨²blico al organizar esta gira en grandes estadios, cuando hasta hoy exig¨ªa locales cubiertos de capacidad limitada. Ahora ver a Prince ha dejado de ser algo ¨ªntimo y se ha convertido en un espect¨¢culo de masas, con todas las incomodidades que esto conlleva. Take me with you, Alphabet street, A question ofyou, Sex mu.sic dance romance, A song for You, Little red corvette y Batdance completaron el bloque central de su rec¨ªtal. Setenta minutos de m¨²sica y color sin excesivas sorpresas. De propina, dos canciones m¨¢s: Party men y Baby Im a star.
Si Michael Jackson y James Brown son los aut¨¦nticos reyes de la m¨²sica negra, Prince es un pr¨ªncipe que duda sobre el trono que va a ocupar. Le tienta el lado comercial y deslumbrante de Jackson, pero tambi¨¦n la pureza y visceralidad del viejo Brown. Prince es, como sus dos maestros, un torbellino capaz de cambiar el curso del pop actual y basa su ¨¦xito en la perfecci¨®n con que realiza los sonidos que han dominado la m¨²sica negra durante las ¨²ltimas tres d¨¦cadas. Sus actuales conciertos son un reflejo vivo de una forma de entender el pop-rock como espect¨¢culo total.
Babelia
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