Poindexter prueba el sabor de la prisi¨®n

El fiscal y la defensa describen de dos formas muy diferentes a John Poindexter, sentenciado por la Corte Federal de Washington. Criminal condenado, mentiroso, obstructor del Congreso y transgresor de la ley, afirma de ¨¦l Lawrence Walsh, uno de los letrados. Por otra parte, sus abogados dicen de ¨¦l que es un distinguido funcionario, brillante jef¨¦ naval y un hombre dedicado a su familia y a la comunidad. La tragedia y el dilema que se le plantea a la justicia es que los dos retratos son verdaderos. El juez Harold Greene dificilmente puede ignorar la impresionante carrera de Poindexter antes de convertirse como consejero de seguridad nacional del presidente Reagan, en una de las figuras clave del esc¨¢ndalo Irangate.No se pueden ignorar los cinco cr¨ªmenes, cada uno punible por s¨ª mismo con un m¨¢ximo de cinco a?os de prisi¨®n, ni la falta de arrepentimiento del acusado. (...)

Poindexter ha sido declarado culpable, no por seguir una pol¨ªtica equivocada, sino por enga?ar al Congreso sobre ¨¦sta. (...) Los presidentes y sus consejeros discuten, a menudo, la exigencia del Congreso de compartir las decisiones de pol¨ªtica exterior; pero no pueden negar la petici¨®n leg¨ªtima del Congreso de una informaci¨®n verdadera. (...) Experimentar la c¨¢rcel, poco, en reconocimiento de su admirable carrera (...), ser¨ªa parte de un castigo adecuado para John Poindexter.

11 de junio.