Mandela pide ayuda a Europa para los presos y exiliados
El l¨ªder surafricano Nelson Mandela pidi¨® ayer ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo "dinero, a paladas" para el realojamiento de m¨¢s de 20.000 exiliados y de los 1.000 prisioneros pol¨ªticos, incluidos los condenados a muerte, que ser¨¢n liberados pr¨®ximamente. "Dentro de poco"dijo el pol¨ªtico surafricano, utimaremos los detalles de una amnist¨ªa general que pueda garantizar la repatriaci¨®n".
Mandela solicit¨® tambi¨¦n al Parlamento su oposici¨®n al levantamiento o incluso revisi¨®n parcial de las sanciones contra Sur¨¢frica, en un intento de que los eurodiputados hagan presi¨®n sobre los jefes de Estado y de Gobierno de la CE, que debatir¨¢n este tema en la cumbre de Dubl¨ªn. Las acciones deben continuar hasta que se produzcan "cambios profundos e irreversibles que impidan frenar la eliminaci¨®n del apartheid", afirm¨®. La revocaci¨®n de estas medidas "ser¨ªa un desastre".Los cerrados aplausos de la Euroc¨¢mara ante esta demanda reflejan el apoyo mayoritario del Parlamento, aunque medio centenar de eurodiputados, encabezados por el radical italiano Marco Panella, han pedido una revisi¨®n de las sanciones, con el apoyo de los eurodiputados populares espa?oles Fernando Su¨¢rez y Carmen Llorca. El presidente del Parlamento, Enrique Bar¨®n, afirm¨®: "Me da la impresi¨®n de que no van a modificar la postura ampliamente mayoritaria de la C¨¢mara". La solicitud de ayuda ser¨¢ transmitida hoy por Mandela al comisario Manuel Mar¨ªn, responsable de cooperaci¨®n.
Mandela tom¨® la palabra en su calidad de primer galardonado con el premio Sajarov.
El discurso de Mandela llev¨® la violencia a la C¨¢mara de Estrasburgo. El luxemburgu¨¦s Robert Kriepps dijo al ultraderechista franc¨¦s Jean Marie le Pen: "Espero que no le haya quitado el apetito". La frase encresp¨® los ¨¢nimos derechistas y el socialista belga Jos¨¦ Happart intento calmarlos. Le Pen le escupi¨® dos veces. Su correligionario Bernard Antony abofete¨® a Happart, que le replic¨® con un rodillado en los genitales que tir¨® a Antony al suelo.
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