Alan Garc¨ªa considera pr¨®xima la derrota de Sendero Luminoso

El presidente saliente de Per¨², Alan Garc¨ªa, dijo ayer que no se presentar¨¢ a las elecciones de 1995 y asegur¨® que el Estado est¨¢ cerca de una victoria definitiva sobre Sendero Luminoso gracias a lo que defini¨® como transformaci¨®n de la mentalidad y la mayor informaci¨®n de las Fuerzas Armadas. En declaraciones a varios medios informativos extranjeros, entre ellos EL PA?S, Garc¨ªa agreg¨® que Sendero est¨¢ desmoralizado y su gente cansada.

El presidente peruano dijo que Sendero Luminoso es como un "alien¨ªgena, como un octavo pasajero que est¨¢ dentro de esta nave y no sabemos de d¨®nde vino y qu¨¦ objetivo tiene; s¨®lo sabemos que es mort¨ªfero y parece inextinguible". Precis¨®, sin embargo, que a los 10 a?os de haberse declarado en guerra contra el Estado, ha entrado en un proceso de desmoralizaci¨®n, lo que permiti¨®, agreg¨®, que cayera su cuartel general en Lima. Alan Garc¨ªa anunci¨® que en pr¨®ximos d¨ªas se podr¨ªan anunciar hechos mas importantes en la lucha contra Sedero Luminoso.Al analizar el proceso electoral del domingo pasado, observ¨® una mayor independencia pol¨ªtica del electorado, y se identific¨® con el 60% del voto a Alberto Fujimori, ganador de los comicios, de quien dijo representa la negaci¨®n de lo que taxativamente defiende Vargas Llosa. Adem¨¢s de resaltar ampliamente el sufragio de los marginales y pobres -que fueron quienes votaron mayoritariamente por el candidato de origen japon¨¦s- y de demarcarse de su futura acci¨®n gubernativa, el presidente saliente observ¨® que uno de los equ¨ªvocos de la derecha fue plantear "un razonamiento maniqueo: o con Alan [Garc¨ªa] o con Mario [Vargas Llosa]".

Sentido hist¨®rico

Sobre su mandato dijo: "He remado en el sentido de la historia o, por lo menos, en el sentido de lo que piensa mi pueblo". Seg¨²n Alan Garc¨ªa, la guerra sucia, la agresiva campa?a electoral de los meses anteriores, comenz¨® en 1987 cuando declar¨® su intenci¨®n de nacionalizar el sistema financiero privado del Per¨². M¨¢s adelante neg¨® rotundamente que pretendiera presentarse a la reelecci¨®n en 1995 y se?al¨® que continuar¨¢ en la pol¨ªtica corno militante en dos temasque le apasionan: la regionalizaci¨®n de Per¨² y la integraci¨®n latinoamericana."Soy un pol¨ªtico combativo, del APRA y militante. Un hombre de izquierdas pero dern¨®crata. No creo en la pol¨ªtica de escritorio, de biblioteca", reiter¨®. Alan Garc¨ªa se mostr¨® partidario de apoyar la revoluci¨®n cubana: "S¨¦ que 1991 ser¨¢ un a?o de contienda contra Cuba", indic¨®. Aunque discrep¨® con su r¨¦gimen, argument¨® su defensa en que Cuba "es un tema simb¨®lico en el continente".

En cuanto a la deuda externa, cuya pol¨ªtica de no pago le enfrent¨® con los organismos internacionales, Alan Garc¨ªa insisti¨® en que "no se necesita pagar la deuda para mantener la democracia. La deuda no puede ser un cupo para mantener la libertad en un pa¨ªs. Por el contrario, la deuda se vuelve a veces una hipoteca que termina con la libertad".

En cuanto a la econom¨ªa, quiz¨¢ el ¨¢rea m¨¢s conflictiva del mandato de Garc¨ªa, el presidente saliente considera que deja a su sucesor activos totales por m¨¢s de 900 millones de d¨®lares, un crecimiento del PIB en el ¨²ltimo a?o de 1,3%, 10 veces mayor que el conseguido por el Gobierno anterior de Bela¨²nde Terry, dijo; una merma en el salarlo m¨ªnimo del 30%.

Alan Garc¨ªa dio al futuro Gobierno de Fujimori las ventajas de una enorme votaci¨®n, el peso aplastante de un triunfo fundamental para la estabilidad pol¨ªtica de Per¨², que a su vez baje las expectativas inflacionarias. En este cuadro, manifest¨® su apoyo decidido a la concertaci¨®n no s¨®lo de partidos pol¨ªticos sino de organizaciones institucionales, que ayuden al nuevo Gobierno a superar la incertidumbre pol¨ªtica y los problemas estrictamente econ¨®micos. Garc¨ªa dice que el APRA se mantendr¨¢ independiente, aunque apoyar¨¢ al Gobierno de Fujimori, y que las fuerzas nacionalistas y las de la izquierda tienen un serio compromiso ante el futuro.