Los sindicatos estudian una propuesta de Renfe para autorregular las huelgas en la empresa
El responsable de recursos humanos de Renfe, Jos¨¦ Luis Adell, discute desde hace un mes con CC OO, UGT y el Sindicato Espa?ol de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (SEMAF) un documento en el que se recogen las l¨ªneas generales que se pretenden aplicar en la empresa en materia de relaciones laborales. El documento aborda la necesidad de conseguir la autorregulaci¨®n del derecho de huelga y resolver lo que el informe califica de escollo fundamental en la direcci¨®n de los 50.000 empleados de Renfe: la distribuci¨®n de efectivos "y su adecuaci¨®n geogr¨¢fica y funcional".
El nuevo equipo, que se ha hecho cargo de la direcci¨®n de personal en Renfe desde el pasado mes de diciembre y que encabeza Jos¨¦ Luis Adell, ha elaborado un documento titulado Pol¨ªtica de recursos humanos, en el que se critica con dureza la gesti¨®n del departamento que dirigi¨® hasta su nombramiento Dami¨¢n Navascu¨¦s, actual presidente de la filial de Renfe, Comfersa.Seg¨²n afirma el informe, que persigue consensuar un acuerdo marco en relaciones laborales "para propiciar la paz social, el uso responsable de los deberes y derechos y una negociaci¨®n positiva del noveno convenio colectivo" (el vigente, bianual, expira este a?o), en el ¨¢rea de recursos humanos "se han venido manteniendo actitudes de confrontaci¨®n con los sindicatos que han propiciado una important¨ªsima p¨¦rdida de credibilidad". La consecuencia de tales actitudes ha sido una p¨¦rdida por conflictos de 3,5 millones de horas en los ¨²ltimos tres a?os.
Sobre la cultura de la empresa, el documento afirma que ,les reglamentista" (Renfe tiene un cuerpo de m¨¢s de 100 personas exclusivamente dedicadas a la tramitaci¨®n de expedientes internos), con una normativa laboral "profusa, confusa, en muchos casos incumplible", y todo ello agravado por una gesti¨®n de personal "rutinaria y burocratizada".
El mea culpa, aunque sea por cuenta ajena, de la actual direcci¨®n de personal de Renfe va m¨¢s all¨¢ al calificar de desproporcionada y excesiva la cifra de cuadros directivos, 2.500, y describir la rigidez de esquemas, con m¨¢s de 240 categor¨ªas y 18 niveles salariales. Adell se ha reunido al menos una vez por semana desde hace un mes con la comisi¨®n paritaria que forman dos miembros de CC OO, dos de UGT y uno del SEMAF para exponer la necesidad de modificar el clima laboral, as¨ª como la necesidad de conseguir un compromiso sobre la autorregulaci¨®n de conflictos y la movilidad geogr¨¢fica y funcional de una plantilla que en t¨¦rminos cuantitativos se considera adecuada.
Los tres sindicatos, que se batir¨¢n electoralmente en Renfe en el ¨²ltimo trimestre del a?o, consideran que es necesaria m¨¢s concreci¨®n en las propuestas para entrar en una negociaci¨®n propiamente dicha, pero parten de actitudes distintas. El portavoz de CC OO, sindicato mayoritario en Renfe, Jes¨²s Gonz¨¢lez, asegura que no negociar¨¢ ning¨²n punto que modifique las condiciones de trabajo pactadas, lo que significa un no rotundo a una posible negociaci¨®n de la movilidad y desconf¨ªa de una direcci¨®n de personal "que habla bien, pero que trata de imponer un modelo de gesti¨®n en cuya elaboraci¨®n no hemos participado".
Por su parte, el secretario federal del sector ferroviario de UGT, Antonio Moral, considera positivo el talante de la nueva direcci¨®n y se muestra a favor de "ir consensuando grandes l¨ªneas antes de entrar en la negociaci¨®n del nuevo convenio, pero sin prisas y sin pretender que en dos meses negociemos pol¨ªtica de personal y l¨ªneas maestras del convemo". Moral reconoce que en lo que se refiere a la actitud ante la nueva direcci¨®n y su propuesta de negociaci¨®n no existe unidad de acci¨®n con CC OO.
Por parte del SEMAF, su secretario general, Juan Oliver, afirma estar dispuesto a discutir "en lo que afecta a los maquinistas e incluso a negociar compromisos si hay contrapartidas".
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