Fujimori retorna triunfal al pueblo de sus padres en Jap¨®n

El de ayer fue para Alberto Fujimori el d¨ªa m¨¢s feliz de su vida tras el reciente ¨¦xito en las elecciones presidenciales de Per¨². "Este es un retorno triunfal", dijo emocionado al visitar Kawachi, el pueblo sure?o japon¨¦s del que emigraron sus padres hace m¨¢s de tres d¨¦cadas. Fujimori tuvo un caluros¨ªsimo recibimiento de los apenas 7.000 habitantes que viven en esta aldea de pescadores y cultivadores de mandarinas, en la prefectura de Kumamoto, que se halla situada a tinos 1.200 kil¨®metros al suroeste de Tokio.

"El efecto del tsunami, la ola despu¨¦s de un maremoto, ha llegado hasta la otra costa del Pac¨ªfico. Tengo m¨¢s parientes aqu¨ª que en mi pa¨ªs", dijo el presidente electo peruano al t¨¦rmino de la visita que ha realizado esta semana, con su hermana Rosa, a Jap¨®n, la tierra natal de la familia.Fujimori lleg¨® a Kawachi a primera hora de la tarde. Un grupo de ni?os agitando banderas peruanas y soportando un calor abrasador salud¨® al presidente electo, y desde ayer hijo predilecto de Kawachi, en la plaza donde se halla una cooperativa agr¨ªcola. Fujimori es ingeniero agr¨®nomo. La multitud lanz¨® inmediatamente los tradicionales gritos de "banzai" (victoria) por "Alberto Fujimori, nuevo presidente de la rep¨²blica de Per¨²". Fujimori es el primer hijo de emigrantes japoneses que llega a la jefatura de una naci¨®n: "Soy cien por cien peruano, pero me siento orgulloso de tener lazos de sangre con Kawachi y de poder decir que el hijo de un emigrante japon¨¦s es el nuevo presidente de Per¨²".

Recorri¨® el pueblo a pie, saludando a sus gentes, pero sin intercambiar m¨¢s all¨¢ de una simple frase en japon¨¦s, lengua que entiende algo pero que apenas habla. Una ca¨®tica rueda de prensa al final de su visita se vio alterada por la falta de un int¨¦rprete adecuado, y Fujimori tuvo que recurrir al ingl¨¦s.

Antes, el futuro presidente de Per¨² acudi¨® a visitar a sus parientes m¨¢s pr¨®ximos, sus t¨ªos Tomiya Inomoto y Shigeo Minami. La bonita casa de Inomoto, hermano menor de la madre de Fujimori, sufri¨® en un instante los efectos de una avalancha humana que pretend¨ªa ver de cerca a Alberto y participar de un brindis con sake, el famoso licor de arroz, mientras ¨¦l, su hermana, su t¨ªo Tomiya y otros amigos degustaban con prisas un magn¨ªfico banquete a base de pescado crudo. Tomiya Inomoto comentaba ayer de ¨¦ste: "Cuando vino por primera vez hace 18 a?os al pueblo era un estudiantillo, pero al verlo en la televisi¨®n el martes en una conferencia de prensa en Tokio me di cuenta de que puede competir con cualquier otro presidente de un pa¨ªs".

Sin respaldo financiero

Fujimori concluy¨® su visita sin poder concretar todav¨ªa ning¨²n respaldo financiero por parte japonesa. El Presidente electo ha Pedido a Jap¨®n que participe en un pr¨¦stamo sindicado por un monto de unos 1.800 millones de d¨®lares, que permitir¨ªa afrontar el pago de los atrasos de la deuda externa peruana y negociar un futuro programa de asistencia financiera por parte del Fondo Monetario Internacional y de los otros organismos multilaterales de cr¨¦dito. Fuentes diplom¨¢ticas peruanas dijeron ayer que los pa¨ªses coordinadores de ese empr¨¦stito que puede quedar formalizado antes de octubre pr¨®ximo son EE UU, Canad¨¢ y Espa?a.

Fujimori, en el avi¨®n en el que regres¨® anoche a Tokio, dijo a un grupo de informadores: "Entiendo que Vargas Llosa diga ahora que se siente liberado tras la derrota, porque era consciente de que no pod¨ªa ganar-, manifest¨® en otro momento de la charla. Fujimori revel¨® parte del encuentro secreto que los dos candidatos tuvieron el 8 de abril tras conocerse los resultados de la primera vuelta.

El escritor le comunic¨® rotundamente: "Alberto, te dejo la presidencia". "Me dijo que abandonaba, que me traspasaba todo su equipo pol¨ªtico, porque se hab¨ªa dado cuenta de que no ten¨ªa capacidad de convocatoria y de que yo ten¨ªa m¨¢s capacidad para gobernar porque no me hab¨ªa enfrentado con la izquierda. Le contest¨¦ que no se retirara, para evitar un vac¨ªo peligroso en la contienda". Y Fujimori puso enigma al relato. Sonriente y con la mirada m¨¢s oblicua posible de sus ra¨ªces niponas, a?adi¨®: "Alg¨²n d¨ªa les contar¨¦ la segunda parte de lo que ocurri¨® aquella noche. Vengan a mi investidura".