Fuga de cerebros a las filas de Yeltsin

Los pol¨ªticos sovi¨¦ticos con visi¨®n de futuro saben de d¨®nde sopla el viento. Mientras el 28? Congreso del Partido Comunista de la URSS (PCUS) discute en el Kremlin, funcionarios de la Administraci¨®n central han comenzado a fugarse, abierta o t¨¢citamente, y a suministrar documentos, fuera de los cauces establecidos, al aparato de Bor¨ªs Yeltsin, presidente del Parlamento de Rusia, seg¨²n afirman fuentes pr¨®ximas a este dirigente.El 28? Congreso del PCUS, que deber¨ªa acabar el 11 de julio, ha pasado ya su ecuador, aunque lleva dos d¨ªas de retraso respecto al programa previsto al comenzar el 2 de julio.

Ayer, el presidente Mija¨ªl Gorbachov y el jefe del Gobierno de la URSS, Nikol¨¢i Rizhkov, se entrevistaron, a puerta cerrada, con los campesinos y obreros delegados al 28? Congreso y los invitados que completan la escasa representaci¨®n de estos sectores en el m¨¢ximo foro de los comunistas de la URSS. Seg¨²n la agencia Tass, el di¨¢logo se caracteriz¨® por "un vivo intercabio de opiniones sobre los problemas del desarrollo socioecon¨®mico de la URSS, el lugar y el papel del PCUS en la sociedad, las relaciones entre las nacionalidades, el orden p¨²blico y la disciplina".

"Deseo de hacerlo bien"

La alocuci¨®n de Yeltsin, el viernes, ha tenido una favorable acogida en los medios pol¨ªticos moscovitas, incluidos medios del aparato del Comit¨¦ Central del PCUS. Para muchos, la combinaci¨®n de ultim¨¢tum al PCUS y propuestas para abordar la crisis formulada por Yeltsin fue la revelaci¨®n de que ¨¦ste tiene "un deseo de hacerlo bien" que no le hab¨ªan supuesto antes. No es casual que hasta el mismo Bor¨ªs Guidaspov, jefe del partido en Leningrado, un conservador que busca una imagen centrista, citara a Yeltsin como posible candidato a n¨²mero dos del PCUS.

La fuga de la Administraci¨®n central, amenazada por un recorte dr¨¢stico, no ha comenzado ahora. Varios de los economistas que trabajan para el Gobierno de Nikol¨¢i Rizhkov e incluso asesores presidenciales como Stanislav Shatalin o Nikol¨¢i Petrakov participaron en el desarrollo del programa econ¨®mico que present¨® Mija¨ªl Bocharov, el candidato inicial de Yeltsin al puesto de jefe del Gobierno ruso. Bocharov no result¨® elegido, pero Iv¨¢n Silaiev, sobre quien recay¨® el puesto, parece haberse acomodado a las ideas del equipo de Yeltsin.

Guidaspov atribuye a Yeltsin las cualidades de "dureza, eficiencia y seguridad". M¨¢s all¨¢ de las matizaciones pol¨ªticas y de la opini¨®n de Guidaspov, los rusos siguen valorando a sus l¨ªderes por su "firmeza" y "determinaci¨®n". De ah¨ª que muchas de las cr¨ªticas a Gorbachov vengan de suponerle un car¨¢cter d¨¦bil. Yeltsin, hoy el hombre m¨¢s popular de la URSS, tiene buenas relaciones con los sectores tecnol¨®gicamente m¨¢s avanzados de la econom¨ªa, como el complejo militar industrial. Esta rama punta culpa a la direcci¨®n del pa¨ªs de la falta de un programa coherente de reconversi¨®n de la industria militar en civil.

Dos 'cuarteles generales'

Como el Kremlin, cuartel general de Gorbachov, el Parlamento ruso, cuartel general de Yeltsin, est¨¢ junto al r¨ªo Moskova, en este caso en la ribera llamada Krasnaiapresnia. Y aqu¨ª reina un ambiente de trabajo donde la "obsesi¨®n por hacer algo concreto" es elemento dominante. Los resultados est¨¢n a¨²n por ver. Estos d¨ªas, el Parlamento ruso est¨¢ formando el Gobierno. El s¨¢bado el comit¨¦ de finanzas debat¨ªa la candidatura para esa cartera. El aspirante es lo que se llama un tecn¨®crata: Bor¨ªs Fiodorov, de 32 a?os, que ha cursado estudios en el Reino Unido y que desde el a?o pasado trabaja como asesor en el departamento econ¨®mico del Comit¨¦ Central del PCUS. Esta ¨²ltima circunstancia no favorec¨ªa mucho al pretendiente, que, sin embargo, inspiraba gran respeto por su dominio del sistema impositivo occidental. Curioso era ver c¨®mo el diputado Polos¨ªn, un grueso sacerdote ortodoxo vestido con su sotana decorada con una gran cruz, se interesaba por las intenciones de Fiodorov respecto a los futuros impuestos de la Iglesia.

Yeltsin quiere controlar las muchas riquezas del subsuelo ruso, entre ellas el oro y los diamantes de Siberia, hoy gestionadas por un comit¨¦ gubernamental, adem¨¢s de? Ministerio de Finanzas de la URSS, el Ministerio de Metalurgia y el de Construcci¨®n de Maquinaria Media. Yeltsin fue la semana pasada a visitar el Ministerio de Finanzas de la URSS para enterarse del destino de estas riquezas. "El oro se va del pa¨ªs en cantidades no justificadas. Hay que poner orden aqu¨ª", dijo Yeltsin ante el Parlamento.