El mayor coleccionista privado de arte de la URSS se siente amenazado y pide protecci¨®n
Unos desconocidos robaron de su apartamento obras de Juan de Flandes, Kandinsky y Cranach
Treinta cuadros de gran valor art¨ªstico, adem¨¢s de numerosos iconos, miniaturas y joyas fueron robados el 27 de julio de un apartamento moscovita de s¨®lo dos habitaciones. All¨ª vive el mayor coleccionista de arte europeo occidental de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, V¨ªktor Maguids, y su esposa Mar¨ªa, una pareja de 63 a?os que se conoci¨® en los campos de concentraci¨®n de Stalin. Durante el robo permanecieron maniatados por los delincuentes mientras ve¨ªan c¨®mo su colecci¨®n sal¨ªa por la puerta. El Fondo Sovi¨¦tico de Cultura ha anunciado que entregar¨¢ 50.000 rubios (80.000 d¨®lares al cambio oficial) -ocho millones de pesetas- de recompensa a quienes proporcionen pistas para su localizaci¨®n. Maguids ha pedido protecci¨®n para ¨¦l y sus bienes.
"A eso de las once de la ma?ana del viernes 27 de julio me dispon¨ªa a salir de compras. La verdad es que ni siquiera tocaron el timbre. Estaban esperando. Cuando empec¨¦ a abrir la puerta para salir del apartamento, sent¨ª un golpe y ca¨ª en el pasillo. Entraron tres j¨®venes y cerraron la puerta. Como me agarraron, trat¨¦ de liberarme, pero entonces me golpearon duramente, me ataron y me amenazaron con una pistola", cuenta V¨ªktor Maguids.Los ladrones sab¨ªan a lo que ven¨ªan. Eligieron los lienzos e iconos m¨¢s valiosos. La persona que los envi¨® -porque no hay duda de que cumpl¨ªan un encargo- conoc¨ªa muy bien c¨®mo estaba distribuida la colecci¨®n en el peque?o apartamento. Los asaltantes, naturalmente, se llevaron tambi¨¦n las cosas modernas de valor. que encontraron. "Me robaron todas mis joyas", dice Mar¨ªa V¨ªktor Maguids cuenta, impasible, c¨®mo perdi¨® en 20 minutos varios millones de d¨®lares.
"La p¨¦rdida es inmensa, s¨ª. Pero la verdad es que doy las gracias de estar vivo. La cosa pudo haber terminado mucho peor", comenta al respecto mientras conversamos en la pieza que hace de sala y en cuya pared hay unos cinco lienzos sin marcos. "Tambi¨¦n pensaban llev¨¢rselos", me explica Maguids cuando nota que me fijo en ellos. "Incluso les sacaron los marcos, pero luego los dejaron".
El padre, revolucionario
La colecci¨®n ten¨ªa unos 80 cuadros, principalmente de pintores holandeses y flamencos de los siglos XVI-XVII, m¨¢s numerosas porcelanas, miniaturas en hueso y otras obras de arte. Los ladrones se llevaron 29 lienzos, una acuarela de Vasili Kandinsky, los mejores iconos, cigarreras con piedras preciosas, etc¨¦tera.
La colecci¨®n la comenz¨® el padre de V¨ªktor, Yefim Maguids, un revolucionario que luego de huir de Siberia, donde se hallaba desterrado, estudi¨® en Suiza y se diplom¨® por la Universidad de Basilea. Regres¨® despu¨¦s de la revoluci¨®n de febrero de 1917. Con los bolcheviques lleg¨® a ser jefe de la organizaci¨®n estatal de pieles y cueros, pero despu¨¦s de ir a inspeccionar una granja de zorros, en la que descubri¨® ciertas ilegalidades, fue atacado por uno de los empleados. "Pap¨¢ estaba muy nervioso despu¨¦s de la acalorada reuni¨®n en la granja y le dijo al ch¨®fer que se fuera, pues ¨¦l quer¨ªa caminar. En medio del campo le alcanz¨® un hombre y le dio dos hachazos. Despu¨¦s de eso qued¨® inv¨¢lido, y quiz¨¢ a ello se deba que sobrevivi¨® la ¨¦poca de las represiones estalinianas".
Pero el hijo no pudo escapar de la ¨¦poca del terror. En 1945, cuando era un estudiante que no hab¨ªa cumplido todav¨ªa los 18 a?os de edad, V¨ªktor Maguids, detenido y acusado de conspiraci¨®n pol¨ªtica, fue sentenciado a ocho a?os de privaci¨®n de libertad. En Kolim¨¢, zona de campos de concentraci¨®n en el noreste de la URSS, cumpli¨® siete a?os de condena, pero no regres¨® inmediatamente a Mosc¨², sino que se qued¨® trabajando en la regi¨®n hasta 1959.
All¨ª conoci¨® a Mar¨ªa, otra presa pol¨ªtica. Se enamoraron y se casaron. Estudi¨® por correspondencia en el Instituto del Lejano Oriente y se diplom¨® como ingeniero de minas. "Cuando regresamos a Mosc¨², decidimos estudiar por nuestra cuenta Bellas Artes, algo que siempre nos hab¨ªa gustado", dice Mar¨ªa. V¨ªktor Maguids es hoy un reconocido especialista en la pintura de los siglos XVI y XVII, autor de numerosas obras especializadas y asesor de los museos sovi¨¦ticos.
"Que c¨®mo logramos reunir nuestra colecci¨®n? Bueno, la vetdad es que no fue muy dif¨ªcil. En aquella ¨¦poca los sueldos en el norte era comparativamente muy altos, as¨ª es que pudimos reunir un buen capital. Adem¨¢s, estaban los cuadros de mi padre, que pod¨ªamos vender para comprar lo que nos interesaba. Por ¨²ltimo, debo decir que los precios de las obras de arte hasta los a?os setenta eran muy bajos, y uno pod¨ªa encontrar lienzos de valor en los lugares m¨¢s inesperados, incluso en los basureros", explica V¨ªktor Maguids.
Falta de espacio
"A veces nos ofrec¨ªan un excelente lienzo, pero si era muy grande deb¨ªamos rechazarlo. Tenemos esta sala, el dormitorio, los pasillos e incluso la cocina llenos de cuadros. Nos ve¨ªamos obligados antes de comprar a pensar en la falta de espacio", se?ala Maguids. Tambi¨¦n facilit¨® la afici¨®n coleccionista de los Maguids el hecho de que muchos de de los propietarios de obras de arte a los que compraban las hab¨ªan obtenido por casualidad despu¨¦s de la revoluci¨®n. Adem¨¢s, los museos no compraban nada a los particulares.
El robo que sufri¨® hace d¨ªas Maguids ahora preocupa a muchos otros coleccionistas de arte, que en Mosc¨² y Leningrado son cerca de cien y ¨²ltimamente han creado un club propio, con algunos miembros extranjeros. "Le ruego a V¨ªktor que venda la colecci¨®n, si no esta agresi¨®n se va a repetir", dice angustiada Mar¨ªa.
"No es por el dinero por lo que estoy dispuesto a vender las obras de arte que nos quedan, sino para conservar la propia vida. No contamos con ninguna protecci¨®n y no veo qu¨¦ otra cosa podemos hacer para que los delincuentes pierdan inter¨¦s en nosotros". La pareja, de 63 a?os de edad, no tiene herederos.
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