Pen¨¦lope Nabokov

El primer h¨¦roe norteamericano en el conflicto del golfo P¨¦rsico no es un militar, sino una ni?a califormana de 10 a?os de edad, Pen¨¦lope Nabokov. Su odisea en el infierno del golfo P¨¦rsico ha cautivado a la opini¨®n p¨²blica norteamericana los primeros d¨ªas del conflicto entre Irak y Kuwait.

Pen¨¦lope sobrevivi¨® a la invasi¨®n militar de Kuwait el pasado d¨ªa 2, y aguant¨® estoicamente su env¨ªo a Bagdad, donde no tuvo contacto con sus padres y sus familiares durante nueve d¨ªas.

El s¨¢bado, despu¨¦s de viajar a trav¨¦s de 800 kil¨®metros de desierto iraqu¨ª-jordano, Pen¨¦lope lleg¨® a Amm¨¢n sin haber derramado ni una sola l¨¢grima.

Pen¨¦lope se reuni¨® con sus padres el domingo. La aventura de esta ni?a comenz¨® hace 11 d¨ªas, cuando el avi¨®n en que viajaba realiz¨® una parada t¨¦cnica en Kuwait. Pen¨¦lope se dirig¨ªa a India procedente de Londres para reunirse con su madre, Isabel. Las tropas iraqu¨ªes penetraron en el aeropuerto internacional de Kuwait y retuvieron a todos los pasajeros en tr¨¢nsito, incluida Pen¨¦lope. La ni?a viajaba sola y, junto a otros turistas y hombres de negocios occidentales, fue conducida a Bagdad sin que nadie informara de su paradero.

El padre y la madre de Pen¨¦lope iniciaron inmediatamente su b¨²squeda en contacto con el Departamento de Estado norteamericano. Tres d¨ªas despu¨¦s de su desaparici¨®n la ni?a fue localizada en Bagdad, donde la diplomacia estadounidense comenz¨® a negociar su liberaci¨®n con el Gobierno de Sadam Husein, en un momento en el que el l¨ªder iraqu¨ª estaba preocupado ,por consolidar sus posiciones militares en Kuwait.

Durante varios d¨ªas, el ¨²nico contacto entre Washington y Bagdad se refiri¨® al paradero, al estado y al futuro de la ni?a. El Gobierno iraqu¨ª accedi¨®, finalmente a la petici¨®n de los diplom¨¢ticos norteamericanos de que Pen¨¦lope fuera conducida a la Embajada de EE UU en Bagdad en lugar de mantenerla en el hotel donde se hallaban retenidos la mayor parte de los occidentales que fueron sorprendidos por la invasi¨®n militar de Kuwait.

El s¨¢bado, las autoridades iraqu¨ªes concedieron la salida del pa¨ªs a un grupo de 11 norteamericanos pertenecientes todos ellos a la delegaci¨®n diplom¨¢tica en Bagdad (ocho mujeres, dos j¨®venes y la propia Pen¨¦lope). El grupo, acompa?ado por un diplom¨¢tico norteamericano y con todos los permisos pertinentes, cruz¨® Irak y despu¨¦s de 700 kil¨®metros de desierto alcanz¨® Jordania y tambi¨¦n la libertad. La noticia de la llegada de Pen¨¦lope y el resto del grupo a Amm¨¢n fue recibida en Estados Unidos como una gran victoria.

Poco despu¨¦s de llegar a la capital jordana, Pen¨¦lope se puso en contacto telef¨®nico con su padre, Peter Nabokov, que se hallaba en Albany, un suburbio de San Francisco. Pen¨¦lope se alegr¨® much¨ªsimo de hablar con su padre despu¨¦s de pasar tantos d¨ªas entre gente extra?a, y cuando ¨¦ste le pregunt¨® si estaba cansada, la ni?a le contest¨® con voz clara: "Pap¨¢, ?c¨®mo estar¨ªas t¨² despu¨¦s de viajar durante 16 horas en un autocar a trav¨¦s del desierto?".