El hermano del vicepresidente us¨® el despacho para "atraer inversiones segun socios de Cimsa"

., Manuel Mac¨ªas, director de la inmobiliaria Cimsa, conoci¨® a Juan Guerra en marzo de 1988. A partir de entonces le visit¨® varias veces m¨¢s y uno de los principales colaboradores del constructor, Jacinto Bravo, represent¨® a Cimsa en la constituci¨®n de una sociedad conjunta con Corral de la Parra S.A., la empresa matriz de Juan Guerra y Juan Jos¨¦ Arenas.

Los socios madrile?os de Juan Guerra extrajeron la impresi¨®n de que la funci¨®n de aqu¨¦l en el despacho de la delegaci¨®n del Gobierno consist¨ªa en "potenciar la inversi¨®n en Andaluc¨ªa" y atraer dinero a aquella regi¨®n, seg¨²n han comentado.

El testimonio de Mac¨ªas sobre esas visitas es interesante. Le pidieron siempre el carn¨¦ de identidad para acceder a la Delegaci¨®n del Gobierno. Una vez franqueado el control policial de entrada, se acced¨ªa al despacho. Juan Guerra se encontraba s¨®lo en el mismo, y era ¨¦l, personalmente, el que organizaba las entradas y salidas: desped¨ªa a una persona y hac¨ªa entrar al siguiente.

"La primera vez que fui a verle", cuenta Mac¨ªas, "nos tuvo esperando una hora, a pesar de que me acompa?aba su hermano Antonio. La antesala estaba llena de gente. ?l iba haciendo pasar a unos u otros. Cuando nos toc¨® a nosotros, estuvimos con ¨¦l no m¨¢s de diez minutos, de los cuales la mitad se los pas¨® hablando por tel¨¦fono. Me dijo que hab¨ªa muchas posibilidades de inversi¨®n en Sevilla y que har¨ªa bien en meterme en negocios all¨ª".

Manuel Mac¨ªas sigui¨® el consejo. Todos las operaciones conjuntas fueron instrumentadas por Juan Jos¨¦ Arenas, quien hab¨ªa actuado antes en la oferta de dos solares de Sevilla a Cimsa, a cambio de sendas comisiones.