Pedir prestado

Aunque los economistas no se ponen de acuerdo sobre si se ha iniciado una recesi¨®n, muchos grandes bancos norteamericanos est¨¢n llegando a la conclusi¨®n de que, seg¨²n ciertos baremos, sus cuentas de pr¨¦stamos est¨¢n ya en peor situaci¨®n que nunca desde el final de la recesi¨®n de 19741975. Este hecho ha contribuido a crear para muchos de estos bancos la perspectiva econ¨®mica m¨¢s pesimista en m¨¢s de una d¨¦cada.

"Nos dirigimos a una recesi¨®n, y nos encontramos peor de lo que est¨¢bamos cuando salimos de la ¨²ltima recesi¨®n importante", declar¨® Thomas Hanley, analista de Salomon Brothers, refiri¨¦ndose al nivel de activos sin rendimiento de los grandes bancos.El primer problema con el que se enfrentan estos bancos son los cr¨¦ditos problem¨¢ticos. Estos incluyen los que se consideran sin rendimientos, lo que normalmente quiere decir que los pagos han vencido, o probablemente lo har¨¢n, y los pr¨¦stamos renegociados para darle una oportunidad al prestatario, as¨ª como los pr¨¦stamos inmobiliarios para propiedades con hipotecas en ejecuci¨®n.

El ¨ªndice de cr¨¦ditos problem¨¢ticos se estanc¨® en el 3,4% en 1984, mientras el pa¨ªs se recuperaba de la recesi¨®n de 1981-82. El que se espera para 1990 ser¨¢ el m¨¢s elevado desde el 4% de 1977. y el 513% de 1976, despu¨¦s que terminara en 1975 la sever¨ªsima recesi¨®n de la posguerra [de Vietnam].

Por el momento, los, crecientes problemas de bienes ra¨ªces constituyen la mayor preocupaci¨®n de muchos analistas. Durante los ¨²ltimos tres a?os, la cantidad de cr¨¦ditos inmobiliarios con problemas en los bancos de la naci¨®n casi se duplicaron.

A pesar de los problemas, queda el optimismo de que los bancos comerciales no seguir¨¢n el camino del sector de cajas de ahorros, cuyas p¨¦rdidas aumentaron hasta que fue necesaria una gigantesca ayuda p¨²blica.

A finales de marzo, fecha m¨¢s reciente de la que se disponen amplios datos, los bancos sumaron 48.600 millones de d¨®lares en pr¨¦stamos inmobiliarios sin rendimientos, incluyendo tierras cuyas hipotecas est¨¢n en ejecuci¨®n, un 37% m¨¢s que el a?o anterior y un 91% m¨¢s que en 1987. Se calcula que en el primer trimestre de este a?o los bancos perdieron 1.300 millones de d¨®lares en actividades inmobiliarias.

La mayor¨ªa de las p¨¦rdidas registradas proceden de pr¨¦stamos para construcciones inmobiliarias. Las p¨¦rdidas en pr¨¦stamos hipotecarios individuales siguen siendo muy bajas, aunque esto podr¨ªa variar si aumenta el n¨²mero de propietarios que no pueden hacer frente a los pagos de pr¨¦stamos que son superiores a lo que su propiedad vale ahora.

En conjunto, los bancos controlados por Salomon calificaron como irrecuperables 7,60 d¨®lares de cada 1.000 d¨®lares prestados en 1989 y esperan que esta cifra suba hasta 10,20 d¨®lares este a?o, la mayor de cualquier a?o desde que empez¨® a recopilar estos datos, en 1971.

Un hecho alentador lo constituye que los bancos en general est¨¢n mejor capitalizados que hace una d¨¦cada. Las cifras de Salomon indican que el gran banco medio ten¨ªa un accionariado ordinario igual al 5,5% de su activo a finales del a?o pasado, contra el 4,5% en 1973, antes de que comenzara una recesi¨®n.

M¨¢s vulnerables

Pero aunque los bancos est¨¦n hoy mejor capitalizados en general, los prestatarios no lo est¨¢n. El auge de los ochenta dej¨® a muchas compa?¨ªas con niveles de deudas muy superiores a los de ¨¦pocas anteriores. En consecuencia, probablemente sean m¨¢s vulnerables a una recesi¨®n.El hecho de que un cr¨¦dito est¨¦ en una categor¨ªa de riesgo, o incluso de que el prestatario haya dejado de abonar los intereses, no significa que resulte ser un mal pr¨¦stamo. Pero por el momento los inversionistas temen que seg¨²n se vaya debilitando la econom¨ªa muchos pr¨¦stamos terminar¨¢n pareciendo haber sido muy poco inteligentes.

Copyright 1990, N. Y. Times News Service