Objetivo estrat¨¦gico

Tras resaltar la importancia del cooperativismo agrario espa?ol y su relaci¨®n con la Administraci¨®n, el autor hace hincapi¨¦ en el reciente acuerdo entre el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n y la Confederaci¨®n de Cooperativas Agrarias de Espa?a para mejorar los programas de ayuda existentes y potenciar nuevas l¨ªneas de actuaci¨®n con vistas a reforzar la presencia de entidades asociativas agroalimentarias espa?olas en el futuro de una Europa unida.

Hace unos d¨ªas se firm¨® un acuerdo de colaboraci¨®n entre el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n y la Confederaci¨®n de Cooperativas Agrarias de Espa?a. En ¨¦l se concretan diversos puntos para mejorar los programas de apoyo al cooperativismo agroalimentario que con car¨¢cter prioritario se vienen manteniendo desde 1983.La importancia del movimiento agrario cooperativo en nuestro pa¨ªs es notable, situ¨¢ndose en un lugar destacado entre los restantes pa¨ªses de la Comunidad Europea: m¨¢s de 4.400 cooperativas y de 9.400 sociedades agrarias de transformaci¨®n, en las que se integran 1,8 millones de agricultores y ganaderos, constituyen la base social de esta forma de organizaci¨®n econ¨®mica.

En los sucesivos programas de gobierno, el Ministerio de Agricultura ha fijado una pol¨ªtica de apoyo al cooperativismo agroalimentario, instrumentada tanto a trav¨¦s de medidas espec¨ªficas para las entidades asociativas como de medidas generales y en las que a estas entidades se ha dado un trato especial.

Esta pol¨ªtica de apoyo se ha llevado a cabo durante el periodo que fue entre los a?os 1983 y 1989 en la realizaci¨®n de un doble esfuerzo: establecimiento de una normativa de m¨¢s de 50 disposiciones de fomento del cooperativisimo agroalimentario, y de acci¨®n administrativa a trav¨¦s de la aplicaci¨®n de las diferentes l¨ªneas de ayuda para todo el colectivo agrario, y con especial atenci¨®n a los m¨¢s j¨®venes.

Se ha actuado en todos los ¨¢mbitos de la actividad agroalimentaria, tanto a nivel de la producci¨®n agraria y pesquera, de la transformaci¨®n de las estructuras y de la comercializaci¨®n alimentaria, de la formaci¨®n cooperativa y los seguros agrarios colectivos, como del fomento del cooperativismo de la juventud

En resumen, se ha tratado de una acci¨®n aplicada en todos los niveles de la cadena alimentar¨ªa, y en beneficio de todos los activos del sector agroalimentario, para conseguir mejorar su integraci¨®n econ¨®mica, as¨ª como la obtenci¨®n de un valor a?adido suplementario para sus productos y, por tanto, un aumento de su nivel de rentas.

Esta pol¨ªtica de apoyo al cooperativismo agroalimentario ha recibido una atenci¨®n presupuestaria singular en los ¨²ltimos a?os, alcanzando los 83.000 millones de pesetas en el quinquenio 1985-1989 (v¨¦ase cuadro adjunto).

Cabe se?alar que las ayudas a la producci¨®n agraria y pesquera de car¨¢cter cooperativo significaron en el periodo un apoyo por valor de 28.000 millones de pesetas. La pol¨ªtica de ayudas a la transformaci¨®n y comercializaci¨®n alimentarla de car¨¢cter cooperativo se ha aproximado a los 20.000 millones de pesetas-destacando el fomento a la creaci¨®n de nuevas entidades asociativas y el apoyo a los proyectos de inversi¨®n agroindustrial cooperativa, que siempre han representado el 40% de los proyectos totales.

Diversos tipos de ayudas al sector cooperativo agroalimentar¨ªo han percibido 33.000 millones de pesetas, con una presencia singular del apoyo en materia de seguros agrarios colectivos. Finalmente, y por su especial significaci¨®n, merece destacarse la atenci¨®n recibida por el programa de cooperativismo juvenil, que con una subvenci¨®n superior a los 2.500 millones de pesetas ha permitido la integraci¨®n de 14.000j¨®venes en 1.400 agrupaciones cooperativas y la creaci¨®n neta de m¨¢s de 7.500 puestos de trabajo, con una inversi¨®n total por valor de 18.000 millones de pesetas.

Nuevos programas

Esta acci¨®n de apoyo al cooperativismo agroalimentario se encuentra consolidada en el momento presente con una dotaci¨®n presupuestaria que ha alcanzado los 23.000 millones de pesetas en el ¨²ltimo a?o. Numerosas unidades del Ministerio de Agricultura, en colaboraci¨®n con las comunidades aut¨®monas, se han responsabiliizado de la aplicaci¨®n de este importante volumen de fondos. En la actualidad sigue estando justificada la existencia y el reforzamiento de una pol¨ªtica de apoyo al cooperativismo agroalimentario. Los cambios que se est¨¢n produciendo en la pol¨ªtica agraria de la Comunidad, la propia revisi¨®n sobre los niveles de ayuda a la agricultura en diversos pa¨ªses, en particular en Estados Unidos y la CE, con su repercusi¨®n en las negociaciones en curso en el GATI` para cambiar las reglas del comercio internacional de los productos agrarios, convierten a este tipo de pol¨ªticas en uno de los instrumentos m¨¢s eficaces para apoyar a las explotaciones familiares con problemas de viabilidad econ¨®mica.

En este contexto cobra sentido el reciente acuerdo llevado a cabo entre el Ministerio de Agricultura y la Confederaci¨®n de Cooperativas Agrarias de Espa?a para realizar un esfuerzo conjunto por mejorar los programas de ayuda existentes y potenciar nuevas l¨ªneas de actuaci¨®n. Los nuevos retos que se derivan de la constituci¨®n del mercado ¨²nico europeo a partir de 1993 exigen un ejercicio de reflexi¨®n y revisi¨®n de las medidas de apoyo al cooperativismo.

Puntos d¨¦biles

As¨ª, entre los puntos de este acuerdo merecen destacarse aquellos que guardan relaci¨®n con los aspectos m¨¢s d¨¦biles de nuestro movimiento cooperativo. En primer lugar, es preciso lograr una mayor integraci¨®n comercial de las cooperativas, de modo que se alcancen unidades de gesti¨®n unificadas, de dimensi¨®n y potencialidad m¨¢s acordes con las caracter¨ªsticas de los mercados actuales. El objetivo es lograr un mayor n¨²mero y reforzar la actuaci¨®n de las entidades de segundo grado y asimiladas, que como n¨²cleos de una red dirijan la comercial iz aci¨®n en com¨²n de las producciones.

En segundo lugar, se requiere la revisi¨®n y actualizaci¨®n de aquellos programas que tienen por objeto la utilizaci¨®n en com¨²n de medios de producci¨®n y el abaratamiento de los costes. La experiencia de los ¨²ltimos a?os en estas l¨ªneas de actuaci¨®n constituye un buen punto de partida, que se relaciona con la nueva pol¨ªtica fitosanitaria de la Comunidad Europea y con la necesidad de adopci¨®n selectiva de nuevos medios de producci¨®n.

Y en tercer lugar, existe una urgente necesidad por mejorar la cualificaci¨®n de los profesionales del sector cooperativo. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n va a poner en marcha un programa trienal de formaci¨®n mediante cursos y actividades de alto nivel, con una aportaci¨®n de fondos nacionales y comunitarios de hasta el 80% de su coste, con objeto de dar un salto cualitativo en materia de formaci¨®n cooperativa.

En conclusi¨®n, lo realizado en los ¨²ltimos a?os y el desarrollo de nuevos programas deben permitir profundizar en la configuraci¨®n de un movimiento cooperativo bien organizado que nos haga entrar en el mercado ¨²nico con garant¨ªas de ¨¦xito. En el caso espa?ol est¨¢ justificada, ante el futuro de una Europa unida, una presencia suficiente en n¨²mero y en importancia econ¨®mica de entidades asociativas agroalimentarias.

es asesor del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n.