Un pulso con todos

Jes¨²s Calder¨®n, madrile?o de 64 a?os, est¨¢ actuando como portavoz de los 35.000 transportistas aut¨®nomos (due?os de uno a cinco camiones cada uno) que est¨¢n midiendo sus fuerzas con la Administraci¨®n y las dos grandes patronales del sector -la Confederaci¨®n Espa?ola de Transportes de Mercanc¨ªas (CETM) y la Federaci¨®n Nacional de Transportes Discreccionales de Mercanc¨ªas (Fenadismer)- con la huelga que declararon el pasado d¨ªa 9.Calder¨®n, que no pertenece al comit¨¦ de paro del presente conflicto, es el secretario general de la Asociaci¨®n Sindical de Transportistas Aut¨®nomos de las Comunidades de Espa?a (ASTAC-Espa?a) formada, por aproximadamente 16.000 camioneros.

Frustrado piloto de marina mercante porque en su familia hay "tradici¨®n reum¨¢tica" empez¨® a trabajar de camionero en 1950. Calder¨®n se declara "sin ideolog¨ªa pol¨ªtica" y asegura que no ha militado en partidos. Comenz¨® su trayectoria sindical en las primeras agrupaciones gremiles dentro del sindicato vertical franquista. En 1974 fund¨® y presidi¨® la asociaci¨®n Tradimer, de inspiraci¨®n socialista, que abandon¨® desenga?ado en 1986 porque entendi¨® que el Gobierno del PSOE no defend¨ªa los derechos de los transportistas. En ese a?o fund¨® ASTAC, organizaci¨®n que le abona un sueldo por dedicarse a la secretar¨ªa general. Lleva, pues, cuatro a?os sin trabajar en el cami¨®n.Calder¨®n se mueve estos d¨ªas entre una oleada de compa?eros que revolotean nerviosos por la humilde sede madrile?a de la asociaci¨®n: cuatro viejas habitaciones con vistas a un patio de vecinos lleno de ropa tendida al sol. Jes¨²s Calder¨®n se va a jubilar el a?o que viene, as¨ª podr¨¢ disfrutar de sus dos nietos. Est¨¢ casado y tiene tres hijos, que no van a seguir la tradici¨®n familiar de conducir camiones.