Algo m¨¢s que una Hacienda

W. O. En el Pa¨ªs Vasco hay algo m¨¢s que una Hacienda. Cada uno de los tres territorios hist¨®ricos cuenta con su propia Hacienda, que depende de las Diputaciones Forales de Vizcaya, Alava y Guip¨²zcoa. A ello hay que a?adir las competencias transferidas al Gobierno vasco que son gestionadas a trav¨¦s del Departamento de Hacienda, y las que a¨²n conserva el Ejecutivo central.

Un entramado aparentemente complicado, fruto del concierto econ¨®mico, pero que se traduce en una mayor disposici¨®n de pesetas por habitante gestionadas por organismos dependientes de la comunidad aut¨®noma que en cualquier otra parte de Espa?a.

Las diputaciones forales son el gran manit¨² de esta red de administraciones. A ellas les compete recaudar el IRPF, el impuesto de sociedades y parte del IVA, as¨ª como dotar presupuestariamente al Gobierno vasco. Tambi¨¦n tienen competencia para emitir activos financieros (los famosos pagar¨¦s forales, por ejemplo, o los afros, activos financieros con retenci¨®n en origen). A trav¨¦s de estas emisiones, habitualmente m¨¢s atractivas para el inversor que las lanzadas por el Estado, las diputaciones tienen una fuente de ingresos adicional que les permite aumentar sus inversiones en infraestructuras.

Del Departamento de Hacienda depende el control de las cajas de ahorro, las emisiones de deuda p¨²blica (los conocidos como euskobonos), la valoraci¨®n de las competencias transferidas por el Estado y la negociaci¨®n con Madrid del Fondo de Compensaci¨®n Interterritorial (FCI) y el llamado cupo vasco.

El cupo, una de las claves del Concierto Econ¨®mico, es la cantidad que Vitoria paga a Madrid en compensaci¨®n por aquellos gastos en materias no transferidas a la comunidad pero de las que ¨¦sta se beneficia, y en el que se incluye el denominado fondo de solidaridad con las comunidades de menor renta por habitante, que repercute en el FCI. En la actualidad, el cupo est¨¢ fijado en el 6,24% de estos gastos, por entenderse que la econom¨ªa vasca significa el 6,24% del total del PIB espa?ol.

Las relaciones entre la Hacienda de Madrid y la de Vitoria, entre Jos¨¦ Borrell y Alfonso Basagoiti, han sido especialmente llamativas en esta legislatura. Basagolti se ha destacado por la defensa de los intereses autonomistas en temas pol¨¦micos: los pagar¨¦s forales, la no implantaci¨®n del NIF obligatorio en Euskadi o la creaci¨®n de un Banco Central Vasco.

Basagolti asegura que en la pr¨®xima legislatura "el Gobierno vasco tiene que tener un banco propio para solucionar problemas de la financiaci¨®n p¨²blica exclusivamente". Basagolti, que ha cambiado la inicial denominaci¨®n de Banco Central por Banco P¨²blico Vasco, recalca que ese banco no est¨¢ destinado a emitir moneda ni a controlar las reservas porque no tiene competencias sobre ello, pero s¨ª para controlar los coeficientes de las cajas de ahorro, que suponen unos dep¨®sitos de 1,5 billones y sobre las que el Gobierno aut¨®nomo s¨ª tiene competencias.