La firma israel¨ª de armas IAI pide al juez que la espa?ola Ceselsa no venda tecnolog¨ªa

Israel Aircraft Industries (IAI), entidad que interpuso una demanda judicial contra Ceselsa acus¨¢ndola de uso indebido de su tecnolog¨ªa, ha vuelto a dirigirse al Juzgado n¨²mero 14 de Madrid para pedir una medida cautelar con el objeto de que se prohiba a la empresa espa?ola la exportaci¨®n de tecnolog¨ªa. La acci¨®n de IAI se produce como reacci¨®n al contrato que acaba de conseguir Ceselsa en Argentina para la revisi¨®n de los aviones Mirage 3.

El Ej¨¦rcito argentino ha concedido a Ceselsa el contrato para la revisi¨®n y modernizaci¨®n de 17 Mirage 3. La empresa espa?ola, que ha enviado en estos d¨ªas a varios directivos al pa¨ªs suramericano para formalizar los pormenores del acuerdo, se compromete a la renovaci¨®n total de la flota incorporando un sistema de avi¨®nica igual al que tiene previsto para los Mirage 3 del Ej¨¦rcito de? Aire espa?ol. El contrato incluye tambi¨¦n un simulador avanzado. La actividad puramente mec¨¢nica la realizar¨¢n entidades argentinas. Seg¨²n las estimaciones, el contrato asciende a una cifra entre 17.000 y 20.000 millones de pesetas, extremo ¨¦ste que no ha podido ser confirmado en la empresa.El contrato fue firmado, seg¨²n fuentes pr¨®ximas al mismo, a mediados de septiembre, quedando ¨²nicamente pendientes los mencionados pormenores. La existencia del acuerdo se ha guardado en el m¨¢ximo secreto, principalmente por las espinosas relaciones que Ceselsa mantiene con la firma israel¨ª lAl tras romper los acuerdos que les llevaron a presentarse juntos al concurso para renovar los Mirage 3 del Ej¨¦rcito del Aire y, sobre todo, tras presentar esta entidad una demanda de responsabilidad civil de mayor cuant¨ªa acusando a Ceselsa de usar su tecnolog¨ªa en la revisi¨®n de esos aparatos y cuyo concurso gan¨®, definitivamente, la empresa espa?ola en compa?¨ªa de Construcciones Aeron¨¢uticas, SA (CASA).

Tras conocerse el acuerdo, IAI reaccion¨® con la presentaci¨®n de una medida cautelar en el juzgado que lleva la demanda, el n¨²mero 14 que ocupa el magistrado Rafael G¨®mez Chaparro En ¨¦sta solicita que se prohiba cualquier transacci¨®n de tecnolog¨ªa que afecte al objeto de la de manda fuera de Espa?a. Para Espa?a tambi¨¦n la hab¨ªa presenta do anteriormente, pero fue denegada por el juez al considerar que era una cuesti¨®n de inter¨¦s estatal con repercusiones directas en la pol¨ªtica de Defensa y no encontraba da?os y perjuicios.

Argumentos

Precisamente, en la nueva medida cautelar se recuerdan los argumentos esgrimidos al rechazar la anterior y, seg¨²n fuentes cercanas a ?Al, esa es la raz¨®n por la que se pide s¨®lo para las exportaciones. Adem¨¢s, se solicita que se cumpla el contrato firmado en 1986 entre Ceselsa e IAI, seg¨²n el cual se estipula que hasta 1992 la empresa espa?ola no podr¨ªa utilizar informaci¨®n suministrada por la israel¨ª para otra cosa que no fuera el contrato de los Mirage 3 espa?oles. Esta cl¨¢usula ha sido incumplida por Ceselsa en este contrato en Argentina, seg¨²n la firma israel¨ª.

Asimismo, estas fuentes afirman que se pide la medida cautelar porque todav¨ªa queda mucho tiempo para que se dicte sentencia y que, durante ese periodo, Ceselsa podr¨ªa conseguir nuevos contratos en el exterior "si no se toman medidas oportunas". En ese sentido, el juez puede decretar la medida pidiendo una fianza o rechazarla como hizo con la anterior. En concreto, en estos momentos, adem¨¢s de Argentina, tiene relaciones con el Gobierno de Pakist¨¢n para la modernizaci¨®n de la flota a¨¦rea.

La medida cautelar solicitada por lAl es, para la empresa espa?ola, llover sobre mojado. Fuentes de la misma han manifestado que "present¨® la demanda con objeto de enciza?ar sus relaciones internacionales", y mantienen que la tecnolog¨ªa que utiliza Ceselsa ha sido desarrollada por ella misma en la modernizaci¨®n de los F- 18 al margen de la informaci¨®n que recibieron de IAL Esa tecnolog¨ªa es la que aplican, seg¨²n la empresa, en la revisi¨®n de los aparatos espa?oles y en el exterior.

La demanda presentada por lAl y que est¨¢ en curso fue admitida a tr¨¢mite el 3 de julio. ?Al acusa a Ceselsa de haber roto los compromisos suscritos con ella y la reclama un total de 1.646 millones de pesetas, de los que 120 millones corresponden a gastos y 1.526 millones al valor de la tecnolog¨ªa transmitida a Ceselsa, seg¨²n las estimaciones de la empresa israel¨ª. Con el mismo car¨¢cter subsidiario, reclama 10 millones de d¨®lares (cerca de 950 millones de pesetas al cambio actual) por beneficios dejados de obtener y 100 millones de d¨®lares (unos 9.500 millones de pesetas) por el mismo concepto pero en todo el mundo.

La demanda tambi¨¦n implica al Ministerio de Defensa espa?ol, al que se pide que aclare si es verdad que exigi¨® que el contrato se concediera a empresas espa?olas y si oblig¨® a la constituci¨®n del consorcio Attorrn entre Ceselsa y CASA sin la presencia de socios extranjeros.