Por una soluci¨®n pac¨ªfica en el Golfo
El presidente norteamericano George Bush y el canciller alem¨¢n Helmut Kohl se pronunciaron ayer por conseguir una soluci¨®n pac¨ªfica a la crisis del Golfo, al tiempo que insist¨ªan en la necesidad de mantener unida la coalici¨®n internacional que se enfrenta al presidente iraqu¨ª Sadam Husein.
Durante un discurso en la antigua catedral imperial de Speyer, Kohl, adem¨¢s de insistir en que la crisis del Golfo debe tener una soluci¨®n pac¨ªfica, record¨® el tema de los rehenes occidentales en Irak para los que pidi¨® su total e inmediata liberaci¨®n, un asunto pol¨¦mico ya que todav¨ªa colean los ecos del viaje del ex canciller Willy Brandt a Bagdad con el benepl¨¢cito del Gobierno, y quien se llev¨® consigo a m¨¢s de un centenar de rehenes.
Tras la ceremonia en la catedral, los dos l¨ªderes y sus esposas se trasladaron a comer a la residencia privada del canciller en el pueblecito de Oggersheim, de hecho un barrio residencial de Ludwigshafen. Frente a la modesta y funcional casa de los Kohl esperaban numerosos representantes de la prensa. Ambos l¨ªderes resumieron lo tratado durante su encuentro. Pese a que segu¨ªa cayendo la lluvia, Kohl y Bush aparecieron en el portal de la casa.
"Sabemos que el presidente Bush es un hombre amante de la paz", dijo Kohl, "que ahora tiene que tomar decisiones dif¨ªciles. Esperamos todos que se llegue a una soluci¨®n pac¨ªfica en Oriente Pr¨®ximo, pero para ello ser¨¢ necesario restaurar las fronteras internacionales reconocidas. La coalici¨®n internacional tiene que permanecer unida contra estos actos de agresi¨®n".
Fuentes cercanas al canciller aseguraron m¨¢s tarde que el presidente norteamericano no hab¨ªa hecho ninguna petici¨®n especial a Kohl, lo que da a entender que Estados Unidos se contenta con que la contribuci¨®n alemana al esfuerzo b¨¦lico siga limitada al apoyo econ¨®mico y log¨ªstico, as¨ª como ciertos pr¨¦stamos de material especializado. De hecho, el mejor apoyo que ha podido hacer la nueva Alemania ha sido liberar a las divisiones norteamericanas estacionadas en el Rin, lo que ha permitido que casi la mitad de las nuevas tropas enviadas al Golfo salgan de este cuerpo del Ej¨¦rcito norteamericano.
Bush, por su parte, insisti¨® tambi¨¦n en todo momento en su inter¨¦s por encontrar una soluci¨®n pac¨ªfica, pero quiso recalcar especialmente la necesidad de que se mantenga unida la coalici¨®n.
El canciller alem¨¢n pidi¨® tambi¨¦n a Bush que ejerciera su influencia ante el capital y las empresas norteamericanas para que inviertan en el territorio de la antigua Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana. Asimismo, fuentes cercanas al canciller aseguraron posteriormente que Kohl pidi¨® al presidente Bush que su pa¨ªs iniciara una r¨¢pida ayuda econ¨®mica a la URSS. Algo en lo que Alemania tiene especial inter¨¦s. Seg¨²n esta fuente, el canciller le dijo a Bush que Alemania sola no puede con la enorme carga que supone ayudar a Mosc¨² a salir del atolladero.
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