Voces y coros

Contin¨²a el Auditorio Nacional ocupado por las voces solistas o en coro c¨¦lebres o menos c¨¦lebres, divas o posibles divas. As¨ª sucedi¨® el viernes. En la sala de c¨¢mara, con una asistencia de medio millar de personas, Sintel sali¨® a los medios del patronazgo musical con una idea muy v¨¢lida: atender a las Nuevas Voces de la L¨ªrica. De haber verdadera afici¨®n entre nosotros estas casi "salidas a la mar de cantantes j¨®venes corno la mallorquina Teresa Verdera v la valenciana Gloria Fabuel deb¨ªan ser m¨¢s frecuentes y gozar de constante atenci¨®n.

Premios

Las dos artistas, con todo Y ser poco mas que veintea?eras, se han ganado una importante consideraci¨®n: Verdera es el ¨²ltimo premio Alfredo Kraus y Fabuel el Gayarre de 1988. En el bien distribuido programa ofrecido ahora con el acompanamiento, siempre exacto, de Jos¨¦ Antonio ?lvarez Parejo, Fabuel se dedic¨® a la canci¨®n espa?ola (Monsalvatge y Granados), en tanto Verdera abord¨® melod¨ªas en franc¨¦s y liriche, de Verdi. Sopranos l¨ªricas ambas , una y otra se produjeron con gran criterio y sensibilidad. Hubo alg¨²n problema de af¨ªnaci¨®n en Teresa, pero su l¨ªnea convenci¨® a todos y el color de una voz mordente se mostr¨® en todo su atractivo. En las Canciones negras de Montsalvatge, Fabuel dio v¨ªa activa a su expresividad a trav¨¦s de una voz fluida y que corre bien, y una naturaleza de ansta teatral que se advierte en cualquier detalle.En la Sala Sala Sinf¨®nica Alberto Blancafort dirigi¨® El¨ªas, el mejor oratorio de cuantos compusiera Mendelsisohn. El coro y la orquesta nacionales sonaron cohesionados espl¨¦ndidamente en manos del director catal¨¢n.

Un grupo de solistas de gran categoria, dominado por la asombrosa belleza vocal de la contrato irlandesa Patricia Bard¨®n y la maestr¨ªa del bajo noruego Knut Skram, se complet¨® con otros quehaceres igualmente maestros: el de la soprano aus traliana Yvonne Kenny y el del tenor brit¨¢nico Anthony, Rolfe Johnson, sin olvidar la aportaci¨®n de la soprano ovetense Beatriz Melero.