Sector sin chispa
LA PRESENTACI?N a las Cortes del nuevo Plan Energ¨¦tico Nacional (PEN), anunciada inicialmente para el final del pasado a?o, parece una de tantas actuaciones cuya prioridad se ha visto afectada por el conflicto del golfo P¨¦rsico y la situaci¨®n de interinidad en que vive el Gobierno. Con todo, existe el compromiso de aprobarlo antes del verano. El PEN habr¨¢ de definir la pol¨ªtica de abastecimiento de energ¨ªa para los pr¨®ximos 10 a?os, tomando como base la estimaci¨®n de las necesidades y la previsi¨®n de los medios que las satisfagan en condiciones de econom¨ªa y de seguridad.Pero las nuevas decisiones de inversi¨®n para la ampliaci¨®n del parque de generaci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica con el que atender la ampliaci¨®n de la demanda habr¨¢n de llevarse a cabo previa una adecuaci¨®n de la estructura empresarial del sector que garantice la eliminaci¨®n de las debilidades financieras puestas de manifiesto en el pasado. La concentraci¨®n de empresas generadoras no es ¨²nicamente una exigencia de racionallzaci¨®n de la oferta en un mercado con la dimensi¨®n del espa?ol, sino igualmente una condici¨®n de estabilidad financiera en el futuro.
Es el caso, sin embargo, que a la hora de responder a esas necesidades se han presentado a las autoridades energ¨¦ticas casi tantas propuestas de reordenaci¨®n como grandes empresas existen. Esa incapacidad para definir una m¨ªnima convergencia en el dise?o de soluciones espec¨ªficas -es decir, para encontrar zonas comunes entre los intereses particulares y los sectoriales en la constituci¨®n del futuro de esta industria- es un rasgo cada vez m¨¢s expresivo de un sector que, parad¨®jicamente, en no pocas ocasiones se lamenta de exceso de regulaci¨®n de su actividad. Lamentos compatibles, parad¨®jicamente, con la frecuente cesi¨®n a las autoridades de la capacidad de iniciativa y arbitraje en cuestiones en gran medida intrasectoriales.
El respaldo Final a la propuesta ministerial de creaci¨®n de una sociedad gestora de los activos nucleares, hoy propiedad de las 11 principales compa?¨ªas, no equivale a la resoluci¨®n de todas las dificultades que en este aspecto han sido apuntadas. Independientemente de la soluci¨®n a la cuesti¨®n de la moratoria que afecta a varias centrales nucleares, son problemas de valoraci¨®n de los activos, de gesti¨®n y de distribuci¨®n del poder en ese holding los que amenazan la consolidaci¨®n del acuerdo. La concentraci¨®n del resto de los activos de generaci¨®n, y su diferenciaci¨®n o no de los correspondientes de distribuci¨®n, constituye el principal punto de divisi¨®n entre compa?¨ªas y autoridades energ¨¦ticas y de aqu¨¦llas entre s¨ª. La necesidad de que este proceso quede cerrado o esbozado en sus l¨ªneas fundamentales antes de la definitiva elaboraci¨®n del PEN exige de los empresarios y.principales accionistas de estas compa?¨ªas un esfuerzo de conjunci¨®n mayor que el mostrado hasta ahora, so pena de hacer de la necesidad de regulaci¨®n p¨²blica en este sector su principal virtud.
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