Vecinos de Orcasitas esconden a un pr¨®fugo que vive desde hace un mes fuera de su casa

Agust¨ªn Gil Mu?oz, un capataz de jardiner¨ªa de 19 a?os que trabaja en la Casa de Oficios de Orcasitas, lleva desde hace un mes a una pareja de guardias civiles tras sus talones por negarse a prestar el servicio militar. Los agentes han advertido a sus padres, a los de su novia y a los compa?eros de trabajo que encubrir a un delincuente est¨¢ penado. Sus compa?eros le han ofrecido pisos donde duerme desde entonces, han colgado pancartas en el edificio municipal y recogen firmas de apoyo en el barrio.

Fernando Caballero, director de la Casa de Oficios, donde imparte clases Agust¨ªn Gil Mu?oz. indic¨® que una pareja de guardias civiles se present¨® en el local municipal la semana pasada para preguntar por Tin¨ªn, el nombre de Agust¨ªn Gil para sus amigos. "Tra¨ªan una foto de cuando ¨¦l ten¨ªa 12 a?os, me preguntaron que cu¨¢ndo fue la ¨²ltima vez que vino Tin¨ªn. No se quedaron satisfechos con mi respuesta y le preguntaron lo mismo al subdirector, con lo cual a uno de ellos lo invit¨¦ amablemente a salir de mi despacho", agreg¨®.Caballero asegura haber advertido a Tinin del riesgo que corre. "Es muy rebelde y ha apostado muy fuerte, pero yo le he dicho que sea un poco h¨¢bil y se declare insumiso, aunque siempre contesta que no es ning¨²n delincuente para tener que declarar nada". El director de la Casa de Oficios afirma que Gil Mu?oz, "a pesar de lo que pueda aparentar por su aspecto", es un joven muy sensato, con las ideas muy claras y una gran aceptaci¨®n entre el alumnado, "raz¨®n por la cual", a?ade, "tiene el apoyo de todos".

Raquel Delgado, novia de Agust¨ªn, asegura que la llamaron de la Guardia Civil para decirle que ella era la ¨²nica que pod¨ªa convencerle y para preguntarle cu¨¢ndo fue la ¨²ltima vez que vio al novio. Gil Mu?oz a?ade que los guardias civiles se presentaron en su casa para decirle a su madre que "lo que estaba haciendo su hijo era m¨¢s grave de lo que ella cre¨ªa" Seg¨²n relata Gil, tambi¨¦n advirtieron a su madre de que si al darle el alto al hijo ¨¦ste sal¨ªa corriendo, ellos tendr¨ªan que dispararle.

Huir desde el segundo piso

Gil Mu?oz afirma que en ese momento lo pas¨® muy mal, porque todos sus familiares le presionaron para que se presentara ante el juez. "Ya he conseguido que comprendan m¨ª postura y me apoyen, pero antes fue una experiencia muy dura". El joven comenz¨® el pasado viernes a acudir a su trabajo, que se desarrolla en la segunda planta del edificio. "Desde all¨ª me da tiempo a escapar por una salida que tenemos preparada por si se presentan de improviso". Hace 15 d¨ªas consigui¨® que la direcci¨®n del centro le adjudicara un curso de jardiner¨ªa en el coto de Do?ana, con lo que estuvo una semana fuera de la ciudad.Fuentes de la Guardia Civil pr¨®ximas al caso indicaron que el joven se encuentra en la actualidad en estado de b¨²squeda y captura tras ser declarado en paradero desconocido. "A mediados de diciembre recibimos la orden del juez para la detenci¨®n e ingreso en prisi¨®n de Tin¨ªn. Como eran fechas muy se?aladas, decidimos no perseverar en la b¨²squeda, pero al negarse el chico a presentarse, el juez ha tenido que ordenar su b¨²squeda y captura".

Gil dej¨® de dormir en la casa de sus padres, en Alcal¨¢ de Henares, y alterna por las noches entre el domicilio de su novia, tambi¨¦n en Alcal¨¢, y el de un compa?ero, en el barrio de Orcasitas. A pesar de las coacciones recibidas, los amigos y compa?eros de Agust¨ªn Gil le han llegado a ofrecer m¨¢s de ocho casas -"sin yo ped¨ªrselo a nadie", dice-, para que duerma durante el tiempo en que lo busquen. Afirma que no le importa perder la "relativa estabilidad"-gana 140.000 pesetas mensuales- con que cuenta si se trata de luchar por una causa justa. "S¨¦ que no voy a conseguir nada y que en la guerra del Golfo seguir¨¢ mat¨¢ndose la gente, pero me reve lo contra algo que considero in justo y no me iniportar¨ªa por ello perder lo que tengo".

Nada de pol¨ªtica

Gil Mu?oz s¨®lo ha aceptado hasta el momento el apoyo de sus amigos, y se niega a integrarse en "nada que huela a organizaci¨®n pol¨ªtica". Se resiste incluso a aceptar el asesoramiento jur¨ªdico y apoyo institucional del Movimiento para la Objeci¨®n de Conciencia (MOC). "Veo muy bien la labor que hacen con otros chavales y creo que es necesario, pero su pol¨ªtica es declararse insumiso ante el juez militar y yo no quiero hacerlo porque eso significar¨ªa reconocer su autoridad". Juan Carlos Rois, responsable jur¨ªdico del MOC, ha indicado que el caso de Agust¨ªn Gil es el primero que conoce con tales caracter¨ªsticas: "Nosotros presentarnos a todos los insumisos ante el Juez militar para que no nos traten como delincuentes, y ahora suman unos 1.000. No hab¨ªa o¨ªdo hasta el momento que alguien se negara a declarar ante el juez".