Barreras vegetales contra la arena
Los n¨®madas intentan contener las dunas con arbustos
Con ramas secas de palmera, plantas resistentes al desierto y un poco de agua los ant¨ªguos n¨®madas de Mauritania est¨¢n construyendo barreras para salvar sus tierras. La dispersi¨®n de los oasis y sus diferentes caracter¨ªsticas han dificultado la contenci¨®n de las dunas, que han sufrido problemas de, coordinaci¨®n y puesta en marcha.
"ldentificamos las dunas m¨¢s peligrosas, lo que llamarnos cord¨®n de arena, que son formaciones con continuidad y direcci¨®n de avance. Primero construimos una barrera en la cresta de la duna con hojas secas de palmera hincadas profundamente en en la arena", explica Corera Alassane, inspector para la naturaleza de la regi¨®n de Adrar, mostrando los resultados en una duna estabilizada en el oasis de Azoagui.Para la fijaci¨®n definitiva de la dunase plantan ¨¢rboles, arbustos y gram¨ªneas de especies locales o importadas que han demostrado adaptarse bien a la regi¨®n
Los plantones para la barrera se preparan a la sombra del palmeral y se trasplantan despu¨¦s a la duna. "Si la humedad del terreno est¨¢, por ejemplo, a 40 cent¨ªmetros, introducimos la ra¨ªz a esta profundidad y antes de cubrirla de arena se instala un tubo de igual longitud por el que se introducen 40 litros de agua en el momento de plantar para que no se disperse en la superficie", se?ala Alassane.
Con esta t¨¦cnica, desarrollada en Mauritania con ayuda de los expertos de la FAO, las dunas se estabilizan poco a poco, pero no se puede detener la construcci¨®n de barreras porque en cuanto una se pierde cae inmediatamente la siguiente hect¨¢rea de contenci¨®n, como un domin¨®, y se perder¨ªa toda la barrera. Adem¨¢s es important¨ªsimo evitar que los animales del oasis se acerquen a las plantas, porque devorar¨ªan toda la obra. Las cabras de las 2.000 familiasse mantienen en reba?os vigilados y alimentados con huesos de l¨¢tiles.
En los 232.000 kil¨®metros cuadrados del distrito de Adrar viven 50.000 personas en 27 oasis, ante todo del producto de las palmeras que producen 9.000 toneladas de d¨¢tiles al a?o. A la sombra de los ¨¢rboles cultivan algunos cereales (mijo y sorgo) y 7.000 toneladas de hortalizas que se dedican al consumo local.
En la regi¨®n de Adrar se ha detenido el avance del arena en varios oasis, aunque m¨¢s de la mitad siguen amenazados. Junto a la ciudad de Atar, 30 mujeres cultivan una huerta alrededor de un colector de agua. "Esta tierra puede dar todos los bienes de Dios, pero necesitamos herramientas, una bomba para el pozo y afianzar las dunas", afirman y ense?an los pimientos, berenjenas, remolachas y repollos extra¨ªdos a esta arena.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.