V¨ªnculos

The Silencers es un grupo razonable; a pocas madres importar¨ªa tener un hijo tocando con ellos. Miden sus distancias de todo aquello que pueda importunar, y fabrican un pop melodioso asentado en la cordura de unos tiempos medios llevados con alegr¨ªa. Son escoceses. No son ¨¦picos ni mesi¨¢nicos.Los Silencers suenan en directo con esa pulcritud que desde aqu¨ª se considera ya inherente a la condici¨®n de grupo brit¨¢nico. Las guitarras mantienen la tensi¨®n en cada tema, desde atr¨¢s, sin recurrir pr¨¢cticamente a los punteos. Su t¨ªmbrica se funde con la de viol¨ªn y, teclados (¨¦stos ¨²ltimos programados), y la secci¨®n r¨ªtmica tiende a lo h¨ªmnico, pero sin solemnidad. Las voces frasean con habilidad.

El sonido resultante es agradable y fresco, porque Silencers a¨²na pop y tradici¨®n desde el lado festivo. Y lo mismo hacen en sus incursiones extraestil¨ªsticas hacia el blues o el country, m¨¢s celta (pues ¨¦ste es tambi¨¦n uno de sus or¨ªgenes).

Goodbye Mr. Mackenzie, que toc¨® antes como telonero, es un grupo extra?o. Viene de Edimburgo y lo integran seis personas, a cada cual m¨¢s estrafalaria. El guitarra es un punk de 120 kilos que toc¨® anteriormente con Exploited. En los teclados hay un chico y una chica de porte l¨²gubre, casi asc¨¦tico. El cantante es un "tiarr¨®n" de melena rubia, voz solemne y guitarra ac¨²stica psicod¨¦lica.

Cada canci¨®n tiene algo de todos ellos, y ni sus propias madres imaginan a sus propios padres haciendo "aquello".