Baker y Besm¨¦rtnij desapejan los obst¨¢culos para la cumbre de Mosc¨² entre Bush y Gorbachov
El secretario de Estado norteamericano, James Baker, y el ministro sovi¨¦tico de Exteriores, Alexandr Besm¨¦rtnij, anunciaron ayer en Lisboa haber alcanzado "un acuerdo de principio" para resolver los -problemas existentes para la ratificaci¨®n del tratado de desarme de armas convencionales en Europa (CFE), dejando el camino libre a la cumbre de Mosc¨² entre los presidentes de la URSS y de EE UU, Mija¨ªl Gorbachov y George Bush, respectivamente. No se conoce la fecha, pero ambos ministros dijeron que se celebrar¨¢ en la primera oportunidad.
El presidente de EE UU, George Bush, reaccion¨® anoche al acuerdo de Lisboa en un discurso pronunciado en la Academia Militar de West Point. "Estados Unidos y la URSS", dijo, "hernos resuelto nuestras diferencias sobre el CFE, un paso importante hacia una cumbre de las superpotencias".Baker y Besm¨¦rtnij aprovecharon el esp¨ªritu de Lisboa, la buena colaboraci¨®n entre EE UU y la URSS, que permiti¨® resolver el largo conflicto angole?o, para reactivar las relaciones bilaterales y tratar de desbloquear una serie de asuntos pendientes, de manera especial el desarme y la crisis de Oriente Pr¨®ximo.
En el encuentro del mediod¨ªa de ayer en Lisboa, Baker- y su hom¨®logo sovi¨¦tico, despu¨¦s de 24 horas de actividad diplom¨¢tica intensa dedicada esencialmente a resolver los ¨²ltimos po rmenores para la paz en Angola, abordaron los problemas que m¨¢s preocupan a la Casa Blanca y al Kremlin.
Si el sovi¨¦tico puso, sobre todo, el ¨¦nfasis sobre el desarme y ofreci¨® nuevas propuestas para resolver las diferencias que manten¨ªan congelado el tratado CFE, firmado en noviembre en Par¨ªs, sobre reducci¨®n de armas convencionales en Europa, el norteamericano no escondi¨® que su principal inter¨¦s es Oriente Pr¨®ximo.
Respecto al desarme en Europa, Baker asegur¨®: "Hemos alcanzado un acuerdo de principio que resolver¨¢ los problemas [tratado CFEI que preocupan a las dos partes".
Sobre Oriente Pr¨®ximo se uni¨® a ellos un tercer invitado, el ministro sirio de Asuntos Exteriores, Faruk al Shara, que se traslad¨® a Lisboa para tratar la situaci¨®n en la zona y la posibilidad de celebrar una conferencia internacional sobre el enfrentamiento ¨¢rabe-Israel¨ª. Su inesperada llegada ayer a Lisboa suscit¨® especulaciones acerca de una eventual "flexibilizaci¨®n" de la posici¨®n de Damasco en relaci¨®n con las condiciones para la celebraci¨®n de la conferencia regional. Tras dos horas de conversaciones con Al Shara, Baker le entreg¨® una carta del presidente Bush para el presidente sirio, Hafez el Asad. Al Shara dijo que el mensaje norteamericano puede impulsar el proceso de paz en Oriente Pr¨®ximo.
Sirla e Israel han defendido posiciones divergentes acerca de la conferencia, ya que Tel Aviv se opone a la participaci¨®n de la ONU y de la Comunidad Europea (CE), as¨ª como a cualquier forma de inclusi¨®n de la OLP en una de las delegaciones ¨¢rabes. Damasco pre?ende lo contrario para dar a las negociaciones las verdaderas dimensiones de una conferencia internacional y garantizar que la cuesti¨®n palestina no sea escamoteada.
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