Disturbios en Argelia, pese a la desmovilizaci¨®n integrista

Un n¨²mero a¨²n no determinado de personas han sido detenidas en las ¨²ltimas horas en Argelia acusadas de haber protagonizado importantes enfrentamientos con las fuerzas de seguridad al intentar alterar el orden p¨²blico. Por su parte, el presidente del Gobierno, Sid Ahmed Gozali, ha anunciado ya la pr¨®xima formaci¨®n de un Gobierno constituido por personalidades independientes, cuyo primer objetivo ser¨¢ restablecer la paz social y crear el clima adecuado para poder celebrar lo antes posible" las elecciones legislativas presidenciales.

A pesar de que la huelga general promovida por los integristas del Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS) fue desconvocada hace tres d¨ªas, contin¨²an registr¨¢ndose en diversos puntos de Argelia incidentes espor¨¢dicos entre islamistas radicales y fuerzas del orden p¨²blico. Alrededor de 30 personas han pasado en los ¨²ltimos d¨ªas a disposici¨®n judicial. El l¨ªder islamista radical Abasi Madani se ha apresurado a asegurar que ninguno de ellos es militante del FIS, en una h¨¢bil maniobra con la que intenta desmarcar a su organizaci¨®n de los graves incidentes registrados en el pa¨ªs la semana pasada. Sin embargo, fuentes policiales aseguran que muchos de los arrestados pertenecen al Frente Isl¨¢mico o al grupo integrista armado Redenci¨®n y Exilio.Uno de los incidentes m¨¢s importantes sucedi¨® en el barrio argelino de Buruba, cuando cerca de 600 personas trataron ayer de asaltar la comisar¨ªa para liberar a dos detenidos. Otros incidentes se registraron en barrios perif¨¦ricos, cuando comandos islamistas intentaron sabotear la red el¨¦ctrica.

Cinco personas, tres de ellas disfrazadas con uniformes militares, fueron detenidas y acusadas de disparar a la multitud desde veh¨ªculos robados. Al parecer, los detenidos hab¨ªan provocado el p¨¢nico en Argel durante los ¨²ltimos d¨ªas, cuando en plena refriega se dedicaban a disparar contra la multitud.

En la localidad de Djelfa, a unos 400 kil¨®metros al sur de Argel, la polic¨ªa desaloj¨® la principal mezquita de la ciudad. En el incidente se registraron cinco heridos y se localiz¨® un verdadero arsenal de armas caseras compuesto por c¨®cteles molotov, barras de acero y 142 botellas de vinagre utilizadas para hacer frente a los gases lacrim¨®genos.

Se trata de incidentes aislados, pero que confirman la teor¨ªa del primer ministro, Sid Ahmed Gozali, seg¨²n el cual lo urgente es restablecer el orden social y asegurar la tranquilidad del pa¨ªs.

Gozali pronunci¨® estas palabras el domingo por la noche en su primer discurso dirigido a la naci¨®n. Fue un mensaje breve y sincero pronunciado en un escenario muy austero. Gozali anunci¨® que en los pr¨®ximos d¨ªas dar¨ªa a conocer la composici¨®n del Gobierno, formado por personalidades independientes y no vinculadas a los partidos pol¨ªticos. Recalc¨® que la misi¨®n de este Gobierno ser¨¢ la de restablecer el orden p¨²blico y asegurar el clima adecuado para efectuar las elecciones legislativas y presidenciales anticipadas.

Victoria o fracaso

El primer ministro hizo asimismo una velada cr¨ªtica a los integristas al asegurar que "la calle no puede imponer sus leyes con los m¨¦todos violentos" y a?adir a continuaci¨®n que en la situaci¨®n actual "es irrisorio hablar de victoria o de fracaso". Con esa ¨²ltima frase, Sid Ahmed Gozali intervino en una pol¨¦mica provocada por los mensajes de los integristas, que aseguran que el enfrentamiento ha finalizado con la victoria del FIS.Al margen de la pol¨¦mica y el varapalo al FIS, otro punto importante del discurso de Gozali fue el referido al Ej¨¦rcito. De forma amable record¨® el papel de las Fuerzas Armadas y asegur¨® que hab¨ªan decidido permanecer al margen de la vida pol¨ªtica y convertirse en garantes de la Constituci¨®n y de las instituciones. Esta afirmaci¨®n recordaba a los argelinos que el Ej¨¦rcito est¨¢ en la calle de forma provisional, que el estado de sitio y el toque de queda son medidas circunstanciales, y que sobre todo est¨¢ el deseo de proseguir con el proceso democr¨¢tico y devolver el control del pa¨ªs al poder civil.