Derbi, la mejor baza espa?ola en el Jarama
El italiano Ezio Gianola intentar¨¢ conseguir hoy para la firma catalana Derbi una victoria hist¨®rica en el Gran Premio de Europa de motociclismo, octava carrera del Mundial que se disputar¨¢ en el remozado circuito del Jarama, donde se esperan m¨¢s de 65.000 espectadores. Gianola partir¨¢ hoy con su bala roja desde el primer puesto de la parrilla de salida, cosa que no logr¨® ning¨²n piloto espa?ol, ya que las otras dos poles position (primer puesto en los entrenamientos) fue para Luca Cadalora (Honda, 250cc) y Kevin Schwantz (Suzuki, 500cc).
"Por?a miseria. Me he ca¨ªdo cuando estaba casi parado. Iba, lo juro, a 30 por hora "Sono caduto quasi da fermo",, grit¨® Gianola en italianonada m¨¢s entrar en el boxe de Derbi, segundos despu¨¦s de sufrir un absurdo accidente en las primeras vueltas del ¨²ltimo entrenamiento. El italiano, que ya mereci¨® ganar en Jerez, hab¨ªa conseguido la pole en el pen¨²ltimo entrenamiento y acababa de salir de los talleres para intentar mejorarla. Estrenaba neum¨¢ticos y el del delante le traicion¨®. ?l intentaba justificarse ante los suyos, pero lo cierto es que cuando se cay¨® estaba casi parado. "Lo giuro, lo giuro", dec¨ªa.C¨¦sar Rojo, su jefe, intentaba tranquilizarle. Le mostraba la pantalla de los tiempos y le aseguraba que nadie le batir¨ªa. "Es mejor que te caigas hoy que en la carrera", le susurraba Rojo, mientras colocaba una bolsa de hielo en su mu?eca izquierda, resentida por la ca¨ªda. Los entrenamientos terminaron con Gianola en la cl¨ªnica m¨®vil del doctor Costa, mostrando su satisfacci¨®n al contemplar su victoria en el monitor de tiempos que el galeno tiene instalado junto a su mesa de operaciones. "Doctor", le pregunt¨® Gianola, "?cree que mi mano soportar¨¢ toda la carrera?" Costa no dijo ni que s¨ª ni que no. Sabe que lo tiene dif¨ªcil.
Gianola ser¨¢ hoy, junto a Carlos Card¨²s (Honda, 250cc) y un muy motivado Jorge Mart¨ªnez Aspar (Honda, 125cc), las bazas espa?olas en la carrera del Jarama, presidida con toda seguridad por un sofocante calor y contemplada por un aluvi¨®n de aficionados, que prometen dejar peque?o el circuito.
Los tres presumibles protagonistas de la jornada -el podio de 500cc est¨¢ m¨¢s que dif¨ªcil para Joan Garriga (Yamaha)- necesitan la victoria por diversos motivos. Gianola quiere volver a ganar y, adem¨¢s va loco por darle un triunfo a Andreu Rabasa, due?o de Derbi. Card¨²s necesita vencer para poder codearse con Cadalora (cuatro victorias) y el alem¨¢n Helmut Bradl (tres), sus rivales por el t¨ªtulo. Las necesidades de Aspar,son evidentes: acaba de romper con JJ-Cobas y ha de demostrar que ten¨ªa raz¨®n, que aquella moto no era ganadora y que ¨¦sta, la que Metraux y Moeller han puesto en sus manos, s¨ª lo es.
La verdad es que ayer, ante m¨¢s de 20.000 espectadores, que batieron el r¨¦cord de asistencia en entrenamientos, ni Gianola ni Aspar, ni siquiera Card¨²s levant¨® al p¨²blico de la hierba S¨®lo el norteamericano Kevin Schwantz (Suzuki), el nuevo Mamola, y el australiano Michael Doohan (Honda), hombres que manejan la moto como si de un juguete se tratase, provocaron alaridos de felicidad en el p¨²blico. La gente, ansiosa de presenciar espectaculares derrapadas, sabedora de que lo que han esta do viendo por televisi¨®n pod¨ªan presenciarlo en directo, aclamaba a sus ¨ªdolos en cuanto ve¨ªan aparecer sus c¨²pulas por la entrada de la curva.
El sol de Espa?a
La gente se esconde debajo de los andamios de las tribunas. Busca la sombra desesperadamente. Aparece en ba?ador. Las comisarias de pista se desabrochan los monos y se embadurnan de crema para broncearse antes de hora. Trat¨¢ndose del Jarama, estando en Espa?a, un d¨ªa en las carreras es un d¨ªa de playa.El sol arrasa Madrid y quema el Jarama. Los pilotos intentan que direcci¨®n de carrera acorte hoy las pruebas en algunas vueltas. Se conforman con un par de giros. Correr a 35 grados de temperatura no sucede todos los d¨ªas. Y menos si uno viene de Salzburgo, Austria, donde hace apenas quince d¨ªas corrieron a 12 grados, es decir, con 25 grados menos que hoy en el Jarama.
El term¨®metro del ingeniero de Dunlop se?alaba ayer 48 grados a las doce y media del mediod¨ªa con la aguja simplemente colocada encima del asfalto. Eso no es calor. Es un infierno. Y sobre ese infierno van a correr hoy estos muchachos que, tras 40 minutos de carrera, pueden llegar a perder casi dos kilos. Es el calor de Espa?a.
El calor ha ce feliz a los turistas. Tal vez, incluso, a los miles de espectadores que se dar¨¢n cita en el Jarama, pero maltrata las motos y dificulta sobre manera su puesta a punto. El calor asfixiante vuelve desequilibra los carburadores y eleva la temperatura de los motores.
El doctor Claudio Costa, el hombre que cuida de la salud de los pilotos del Mundial, asegur¨® ayer que, de seguir este calor, "los pilotos pueden tener serios problemas para acabar las carreras, ya que a mitad de la prueba pueden perder concentraci¨®n y reaccionar con mayor lentitud ante el peligro". Costa ha sido, precisamente, la persona que ha sugerido que se reduzcan las vueltas de cada cilindrada, cosa que puede decidirse esta misma ma?ana.
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