Cuba, un puerto de primera para la bici china
Empeora la situaci¨®n del pa¨ªs en v¨ªsperas del IV Congreso del partido Comunista Cubano
Fidel Castro, hace unos meses, comparaba la bicicleta con la revoluci¨®n: "No tiene marcha atr¨¢s, pero tiene frenos". Hoy, para economizar combustible, La Habana pedalea peligrosamente en bicicletas chinas de 26 kilos, y la humorada puede volverse contra el l¨ªder cubano. La revoluci¨®n se parece a un ciclista, habituado a correr en terreno llano que tiene ante s¨ª la subida de un puerto pirenaico montando una bicicleta demasiado pesada. C¨®mo remontar un puerto que se presenta de primera categor¨ªa ser¨¢ uno de los temas a tratar, en octubre, en el IV Congreso del Partido Comunista Cubano.
Ante una ascensi¨®n tan empinada como la que deber¨¢n superar los cubanos se plantean varios interrogantes. ?Ser¨¢n suficientes sus recursos f¨ªsicos y morales? ?Cambiar¨¢ el partido de bicicleta? ?Caer¨¢ por inercia o por alg¨²n problema mec¨¢nico? Hasta el 10 de octubre pr¨®ximo, en que tendr¨¢ lugar el IV Congreso del partido, la revoluci¨®n de Castro continuar¨¢ el recorrido de la llanura -salpicada de repechos a lo largo de los 30 a?os de andadura- que precede a una cuesta arriba que podr¨ªa ser definitiva. Este plazo permite todav¨ªa a las autoridades cubanas tomar un respiro y una reflexi¨®n sobre la mejor t¨¢ctica a seguir para dosificar los esfuerzos cuando los m¨²sculos empiecen a agarrotarse. Pasar ese puerto de monta?a es la actual obsesi¨®n del Gobierno de La Habana.La reuni¨®n partidista ser¨¢, seg¨²n un texto de la comisi¨®n organizadora, el congreso del periodo especial dentro del periodo especial, que define la econom¨ªa de guerra puesta en marcha en Cuba para hacer frente a las consecuencias del derrumbamiento del campo socialista europeo.
Decir que la revoluci¨®n cubana vive la crisis m¨¢s grave de su existencia ha dejado de ser original hace ya varios meses. El pa¨ªs, seg¨²n concuerdan los especialistas, perdi¨® el 30% de sus recursos, creando paulatinamente una semipar¨¢lisis de la econom¨ªa. En momentos en que los dirigentes cubanos est¨¢n preparados para enfrentar una crisis energ¨¦tica, las entregas de petr¨®leo sovi¨¦tico de momento no se han interrumpido, pero son los dem¨¢s productos, en particular los agroalimentarios, como la harina, los que no llegan desde hace cinco meses. Los barcos sovi¨¦ticos no dan abasto, y centenas de miles de toneladas de az¨²car esperan bodega con destino a la URSS.
El racionamiento del pan, desde el 1 de junio pasado, a 80 gramos diarios por persona, se suma a la falta de mantequilla, leche, carne y otros productos b¨¢sicos. Las colas se alargan y se multiplican. Al dar cuenta de los trabajos del Comit¨¦ Provincial del Partido Comunista de La Habana, el peri¨®dico Tribuna de La Habana apuntaba: "Si antes, con tres viajes a la red, se distribu¨ªa el ciento por ciento de la cuota, ahora sufri¨® un incremento a 21 [viajes]".
La irritaci¨®n ha llegado al colmo, y los rumores de incidentes o manifestaciones, que llegan a provocar incluso la intervenci¨®n policial, recorren las calles. Tambi¨¦n aumenta el desconcierto ante un discurso oficial ambiguo: unas veces se dice que las cosas empeorar¨¢n y otras que mejorar¨¢n. El Partido Comunista Cubano llam¨® "a todos los comunistas a laborar a favor de parar cualquier bola o rumor malintencionado y que pretenda asociar las escaseces que sufrimos con la falta de voluntad de la dirigencia revolucionaria". Se agita el bast¨®n de la represi¨®n.
El congreso "debe representar un momento culminante en el proceso de reflexiones y de preparaci¨®n para el combate en defensa de la patria y la revoluci¨®n", y los comunistas deben proseguir "la lucha ideol¨®gica por la afirmaci¨®n de la obra, de los principios y de la estrategia de la revoluci¨®n frente a los pusil¨¢nimes, los mediocres y los contrarrevolucionarios".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.