Visado para marroqu¨ªes, argelinos y tunecinos
I. C. El ingreso en Schengen tiene claras repercusiones sobre la pol¨ªtica exterior e interior de Espa?a. Antes incluso de que se formalizase su adhesi¨®n, el Gobierno espa?ol impuso en mayo a marroqu¨ªes, argelinos y tunecinos el visado para entrar en Espa?a, demostrando as¨ª su disposici¨®n a armonizar con sus socios la pol¨ªtica de concesi¨®n de ese documento.
A finales del a?o pr¨®ximo se ver¨¢ obligado a hacer por primera vez otro tanto con un pa¨ªs latinoamericano, la Rep¨²blica Dominicana, y tambi¨¦n con Turqu¨ªa. Una recomendaci¨®n del grupo que no es vinculante aconseja incluso a Espa?a que levante el visado para otros dos pa¨ªses, Australia e Israel, pero en Asuntos Exteriores se cree que ser¨ªa excesivo hacer este gesto con el Estado israel¨ª justo despu¨¦s de haber impuesto el tr¨¢mite a tres naciones ¨¢rabes.
Aun as¨ª, en el reciente debate sobre la ratificaci¨®n del tratado en la Asamblea Nacional francesa, algunos diputados, como el neogaullista Masson, se preguntaron desde la tribuna de oradores hasta qu¨¦ punto la polic¨ªa espa?ola estar¨ªa en condiciones de controlar los flujos migratorios del Magreb. Cuando Schengen entre en vigor, Espa?a se convertir¨¢, en cierta medida, en la frontera meridional de Francia.
De puertas para adentro, la ratificaci¨®n espa?ola de Schengen tendr¨¢ que ser precedida por la promulgaci¨®n de una ley de protecci¨®n de datos personales y por la creaci¨®n de la figura de un comisario que vigile el correcto cumplimiento de la nueva legislaci¨®n por las autoridades. Te¨®ricamente independiente, el comisario ser¨¢, sin embargo, nombrado por seis a?os por el Consejo de Ministros.
Schengen comporta la creaci¨®n en Estrasburgo del que ser¨¢ probablemente el mayor fichero policial del mundo, al que Espa?a contribuir¨¢ el primer a?o con tan s¨®lo 50 millones de pesetas. A la secretar¨ªa general del grupo, con sede en Bruselas, el tesoro espa?ol tendr¨¢ que aportar otros 25 millones y cuatro o cinco funcionarios, que ser¨¢n remunerados por el Estado espa?ol.
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