Tareas para la cumbre

La reuni¨®n de los siete grandes en Londres ( ... ) para su cumbre anual tendr¨¢ su agenda dominada por el octavo hombre de la fiesta, Gorbachov. En el pasado, estas reuniones eran poco m¨¢s que ceremonias, pero en esta ocasi¨®n hay importantes asuntos que tratar. Los siete est¨¢n de acuerdo en no dar a la URSS nuevos programas masivos de cr¨¦ditos o de ayuda.Pero cuando Gorbachov llegue, a mitad de semana, quiz¨¢ alguno de ellos se vea impelido a ir m¨¢s all¨¢ de los consejos t¨¦cnicos que le ofrecen en sus informes. ( ... ) Es verdad que el colapso de la econom¨ªa sovi¨¦tica no ir¨ªa en beneficio de nadie. ( ... ) Alemania parece emerger como el interlocutor entre la URSS y Occidente, lo que es otro aspecto sorprendente de este sorprendente nuevo orden.

El peligro de esta reuni¨®n es que la importancia del declive sovi¨¦tico elimine cualquier otro asunto de la mesa de trabajo. Pero el a?o pasado ha proporcionado otros trabajos a los siete. Las conversaciones sobre comercio mundial siguen bloqueadas ( ... ) y es muy posible que se rompan en breve. ( ... ) La guerra con Irak y la actual b¨²squeda de sus armas ilegales deben estar en sus mentes. ( ... ) Nunca ha habido un momento mejor para someter a control el armamento. ( ... ) La econom¨ªa mundial no se regula sola, ( ... ) necesita ser dirigida. Los siete son sus equipos dirigentes, y, tanto por decisi¨®n como por omisi¨®n, marcar¨¢n su camino para los pr¨®ximos meses.

15 de julio