Por la gracia de Dios

El miedo al separatismo es probablemente m¨¢s fuerte en Espa?a que en cualquier otro pa¨ªs de la Europa occidental. Vascos y catalanes basan sus exigencias de autodeterminaci¨®n en sus diferencias ling¨¹¨ªsticas y culturales. (...) A ninguno de estos dos pueblos se les ha pedido votar si quieren o no pertenecer a Espa?a. Tampoco tienen una mayor¨ªa que presione por ello. (...) En la Constituci¨®n espa?ola hay una impl¨ªcita amenaza del uso de las Fuerzas Armadas, responsables de la salvaguarda de la integridad territorial, en caso de problemas de separatismo. El caso yugoslavo ha demostrado la dificultad de utilizar la fuerza para mantener la unidad en contra de la voluntad popular. En Espa?a, los nacionalistas moderados han prevalecido hasta ahora sobre los radicales. (...) Pero el ejemplo yugoslavo amenaza con envalentonar a los radicales. (...)Para Jon Id¨ªgoras, portavoz de HB, el mensaje balc¨¢nico es claro: "La soberan¨ªa de los pueblos se consigue con sangre y dolor". Y para no quedarse fuera del entusiasmo nacionalista, los tres grupos moderados vascos han declarado su apoyo a las Rep¨²blicas de Eslovenia y Croacia. (...) El catal¨¢n Jordi Pujol mantiene estrechos contactos con el Gobierno esloveno. (...) Pero el nacionalismo catal¨¢n tiende a ser bastante pragm¨¢tico y los radicales son una exigua minor¨ªa. Adem¨¢s, Pujol necesita el benepl¨¢cito del Gobierno central para que transfiera mayores poderes a Barcelona.

20 de julio