Santana, por encima de Col¨®n

Carlos Santana presume de guitarrista fronterizo. Ajeno al paso del tiempo, este pacifista defensor de las drogas blandas se presenta hoy en el festival de jazz de San Sebasti¨¢n, para dar un repaso a una carrera repleta de ¨¦xitos. "En abril del 92 regresar¨¦ a M¨¦xico", comenta ir¨®nico, "para celebrar que mi pueblo ha logrado sobrevivir y est¨¢ por encima del imperio de Col¨®n".

"El p¨²blico que asiste a mis conciertos es como una flor" dice, "mi grupo, la manguera, y la m¨²sica, el agua". Carlos Santana, que acaba de cumplir 44 a?os, se considera "parte de la generaci¨®n de los sesenta, con todo lo positivo y pacifista que eso implica".M¨²sico de directo m¨¢s que de estudio, el guitarrista de Autlan de Navarro (M¨¦xico) se presenta hoy en San Sebasti¨¢n con un espect¨¢culo de tres horas de duraci¨®n. Acaba de publicar un disco de grandes ¨¦xitos, y no le preocupa formar parte de] cartel de un festival de jazz, "porque todas las m¨²sicas pertenecen a la tierra". Vive en California, y demuestra un inter¨¦s especial en dejar claro que su m¨²sica "es de la calle, y tiene que servir para unificar corazones y mentes"

"No creo en los gobiernos y tampoco en la pol¨ªtica. S¨®lo conf¨ªo en la espiritualidad y en Dios. Sin intermediarios". "En abril del 92 celebrar¨¦ con los m¨ªos, en M¨¦xico, haber sobrevivido al imperio de Crist¨®bal Col¨®n", afirma cuando piensa en la proximidad del V Centenario. Est¨¢ convencido de que los males del hombre actual parten de lo que denomina las tres "pes": "Ios padrotes [chulos], los pol¨ªticos y el Papa. Ellos prostituyen el mundo. Odio a los hitlers de los noventa".

Amigo desde el comienzo de su carrera de la fusi¨®n de ritmos, ve con escepticismo el trabajo de hombres como Sting o Paul Simon. "Ellos necesitan mucho m¨¢s a la m¨²sica de colores que la m¨²sica de colores a ellos", afirma con sorna. "Adem¨¢s, siempre ser¨¢n turistas, y yo no...". Reacciona con similar energ¨ªa cuando se le recuerda su relaci¨®n con las drogas: "Son muy anteriores a la medicina del blanco, y muy beneficiosas para meditar. Lo que viene de la tierra no puede hacer da?o al hombre", insiste, "pero con la coca¨ªna, la hero¨ªna, el tabaco y el alcohol, la manipulaci¨®n y los intereses son muy grandes. La mar¨ªa [marihuana], sin embargo, es buena. Las drogas son como un cuchillo: puedes cortar un trozo de manzana para un hambriento, pero tambi¨¦n puedes herirle. La clave, dec¨ªa Buda, es saber balancearte".