Espectacular rescate de un paquebote griego a dos metros de las costas surafricanas
ERIK VAN EES / AGENCIAS, Una hora despu¨¦s de que los ¨²ltimos pasajeros y tripulantes fueran rescatados con helic¨®pteros del maltrecho paquebote griego Oceanos, el barco, de 7.550 toneladas, vol¨® y se hundi¨® en las tormentosas aguas del Indico, a unos dos kil¨®metros de las costas de ?frica del Sur. Las numerosas embarcaciones y aviones que ayudaron a sacar del infierno flotante a sus 582 ocupantes continuaron en la zona, sin embargo, en espera de que se confirmara que todos se encontraban a salvo. S¨®lo 20 personas no han sido localizadas. Seg¨²n la polic¨ªa, el barco recibi¨® una amenaza de bomba antes de zarpar.
Un portavoz policial surafricano manifest¨® anoche que las autoridades portuarias de East London hab¨ªan recibido una llamada telef¨®nica anunciando la colocaci¨®n de una bomba en el barco poco antes de que ¨¦ste se hiciese a la mar. El capit¨¢n del Oceanos neg¨® la autorizaci¨®n necesaria para que un equipo de especialistas revisase la embarcaci¨®n, agreg¨® este portavoz, seg¨²n la agencia Reuter.Las tareas de salvamento del buque naufragado no fueron f¨¢ciles, pese a la cantidad y variedad de los medios puestos al servicio de la empresa, y horas despu¨¦s de finalizadas las maniobras de rescate no se hab¨ªa podido comprobar que existieran muertos o heridos. Anoche, las ¨²ltimas informaciones indicaban que continuaban sin aparecer ¨²nicamente 20 pasajeros, aunque Gerry Everts, un portavoz de las unidades a¨¦reas surafricanas que participaron en el salvamento, dijo a las autoridades: "Quiz¨¢ hayan sido rescatados por un buque que todav¨ªa no ha informado".
El viento soplaba a m¨¢s de 100 kil¨®metros por hora cuando los barcos se dirigieron a todo vapor hacia el tambaleante Oceanos, que efectuaba un crucero de placer desde East London a Durban cuando, cerca de la medianoche del s¨¢bado, su capit¨¢n, el griego Yanis Avranas, se vio obligado a lanzar por radio una se?al de socorro: "El barco est¨¢ sin energ¨ªa y en peligro de hundimiento". Dos horas m¨¢s tarde se cort¨® toda comunicaci¨®n. Las embarcaciones que entretanto hab¨ªan llegado a la zona se acercaron como pudieron, desafiando el temporal, al zozobrante paquebote y, con potentes faros, buscaron n¨¢ufragos entre, las olas como monta?as.
Primero mujeres y ni?os
La mayor¨ªa de los pasajeros del buque fueron rescatados, cuando el paquebote comenzaba' a escorarse peligrosamente, por varios barcos y una docena de helic¨®pteros Puma de la Fuerza A¨¦rea de Sur¨¢frica que a duras penas pod¨ªan acceder hasta los pasajeros, que suplicaban por su vida en medio de fuertes vientos que barr¨ªan el mar y la cubierta del barco. Las mujeres y los ni?os hab¨ªan podido ser colocados en lanchas neum¨¢ticas lanzadas desde el aire por aviones militares H¨¦rcules C-130 o en botes del barco siniestrado. Algunos tripulantes aterrorizados se lanzaron al agua con olas de hasta ocho metros de altura y tuvieron que ser salvados por submarinistas.
Uno de los barcos que se dirig¨ªa hacia el lugar. del naufragio, el carguero Mimosa, con sus bodegas repletas de crudo, sufri¨® una grave aver¨ªa en su sistema de navegaci¨®n debido a la intensidad de la tormenta y tuvo que ser abandonado cerca de Puerto Isabel. El dram¨¢tico hundimiento del Oceanos, un lujoso hotel flotante construido hace 39 a?os, ocurri¨® en una zona denominada Costa Salvaje, en la que la turbulencia de las aguas y la adversa climatolog¨ªa han provocado que numerosos barcos hayan naufragado tras perder el control de la sala de m¨¢quinas.
La proximidad del crucero a la costa impidi¨® que muchos buques se acercaran para recoger a las personas que saltaron al mar, y, por tanto, la fuerza a¨¦rea orden¨® la intervenci¨®n de helic¨®pteros que, a pesar del viento, rescataron poco a poco -de dos a tres personas en cada viaje- a los n¨¢ufragos, que se as¨ªan a las poleas y flotadores lanzadas por los aviadores. Mientras se incrementaba el n¨²mero de helic¨®pteros y aviones de rescate, se dispuso como destino ¨²ltimo de los n¨¢ufragos un hotel contratado por la agencia de viajes que alquil¨® el barco, la TFC Tours. En esta instalaci¨®n se efectu¨® esta madrugada el recuento definitivo del pasaje.
El coronel Brian Wilford, al frente de las fuerzas de rescate, declar¨® que los supervivientes se encontraban "en buen estado y con el esp¨ªritu alto". A pesar de la llamada telef¨®nica que anunciaba la bomba, las causas del desastre no han sido todav¨ªa precisadas, pero una informaci¨®n de la radio surafricana indic¨® que en la tormenta el agua hab¨ªa inundado la sala de m¨¢quinas del buque, propiedad de las l¨ªneas Epirotiki, con base en la localidad griega de El Pireo.
El Oceanos fue construido en astilleros franceses y fletado por primera vez en este pa¨ªs en 1952. Contaba con discoteca, sala de cine, centro comercial, casino y 258 camarotes.
La mayor parte de los pasajeros son personas de avanzada edad, y la traves¨ªa, iniciada el 28 de julio pasado, inclu¨ªa diversas escalas. La agencia de viajes asegur¨® que, seg¨²n sus documentos, iban embarcados 380 pasajeros, 26 empleados suyos y 180 miembros de la tripulaci¨®n, en su mayor¨ªa griegos, egipcios, brit¨¢nicos, h¨²ngaros y mauritanos.
La radio estatal surafricana cuando se conoci¨® el naufragio, efectu¨® un llamamiento a todas las embarcaciones peque?as y pesqueros de los puertos m¨¢s cercanos, East Londom y Puerto Isabel, para que se acercasen al lugar del siniestro y rescataran a las personas que se lanzaron al mar y cuya vida peligraba frente a las costas del homeland de Transkei.
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