Azarosa huida hacia el Norte

Con barba de varios d¨ªas, sucios y despistados, albaneses que consiguieron huir del estadio de Bari tras la revuelta nocturna del jueves, o eludieron la vigilancia militar de los muelles, deambulan recelosos por las calles de la ciudad italiana pero pronto son detenidos.Buscan c¨®mo salir de esta poblaci¨®n y perderse en rutas que les conduzcan hacia el norte del pa¨ªs, donde tengan m¨¢s f¨¢cil el cruce de fronteras con el continente. Un mocet¨®n al que los tres d¨ªas de abstinencia apenas parecen haber menguado una hermosa barriga, reconoce que cuando salt¨® al Vlora en Durres era consciente de que las autoridades italianas ir¨ªan a por ellos. "Mi idea, como la de muchos otros, era poder entrar en Italia y de all¨ª llegar a Espa?a o Alemania".

No parece sin embargo muy probable el cumplimiento del objetivo del robusto y, poco a poco, los albaneses pr¨®fugos, cuya lamentable apariencia f¨ªsica les delata all¨ª donde se encuentran, caen en manos de los carabineros y son trasladados al puerto o al estadio de f¨²tbol.

El Gobierno italiano ha anunciado que la repatriaci¨®n de los albaneses se cumplir¨¢ en tres d¨ªas pero la contundencia de la actuaci¨®n policial ha levantado ya las cr¨ªticas de quienes consideran que el rechazo de la inmigraci¨®n clandestina y masiva y el cumplimiento de las disposiciones nacionales en la materia no est¨¢ re?ido con el respeto a la dignidad del hombre.