Gorbachov comunico a Bush su retorno al poder

"Quiero informar que a las 12.19 [hora de Washington, 18.19 en Espa?a] tuve una conversaci¨®n con Mija¨ªl Gorbachov que dur¨® unos 20 minutos. Fue una buena conversaci¨®n. Gorbachov est¨¢ todav¨ªa en Crimea. Regresar¨¢ a Mosc¨² esta noche o ma?ana. Me dijo que las cosas est¨¢n bajo control". Esta declaraci¨®n del presidente de Estados Unidos, George Bush, a la 13.20 de ayer poma oficialmente punto y final a un episodio vivido con angustia. "Las autoridades constitucionales han vuelto al poder, y la democracia, la libertad y las reformas han prevalecido", a?adi¨®.

Estas eran las manifestaciones del presidente, en su residencia veraniega de Kennebunkport, apenas tres horas despu¨¦s de una conferencia de prensa en la que Bush transmiti¨® todav¨ªa una gran incertidumbre sobre los acontecimientos que se desarrollaban en la Uni¨®n Sovi¨¦tica. George Bush fue el primer dirigente internacional con, el que Gorbachov se puso en contacto una vez que fue liberado de su cautiverio. Antes, el presidente sovi¨¦tico hab¨ªa conversado telef¨®nicamente con el presidente ruso, Bor¨ªs Yeltsin, el gran h¨¦roe de esta historia con final feliz. Ambas llamadas fueron hechas por Gorbachov, que hasta ese momento hab¨ªa permanecido aislado.Cuando son¨® el tel¨¦fono en Kennebunkport respondi¨® uno de los ayudantes militares de Bush, que se encontraba en ese momento de paseo en su bote. Advertido que ten¨ªa una llamada de un jefe de Estado extranjero, Bush regres¨® a la costa y contest¨® desde el tel¨¦fono de su dormitorio.

Durante la conversaci¨®n entre los m¨¢ximos dirigentes de las dos superpotencias -habituados a di¨¢logos telef¨®nicos casi diarios desde hace a?os estuvo presente la esposa de Bush, Barbara, que se interes¨® por el estado de salud de la primera dama sovi¨¦tica, Ra¨ªsa, que ha permanecido junto a su marido durante las jornadas de arresto domiciliario. Ambos, seg¨²n inform¨® Bush, se encuentran actualmente en perfectas condiciones f¨ªsicas. Ra¨ªsa transmiti¨® tambi¨¦n sus mejores deseos para el matrimonio Bush.

Aparentemente, Gorbachov no relat¨® a Bush todas las circunstancias de su detenci¨®n, aunque s¨ª mencion¨® que sus guardianes le hab¨ªan sido fieles en todo instante. No precis¨® si hab¨ªa sido maltratado en alg¨²n momento. Bush y Gorbachov no entraron en detalles sobre las medidas que el presidente sovi¨¦tico tomar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas ni sobre las eventuales dificultades que encontrar¨¢ para recuperar un completo control del poder. "Lo ¨²nico claro es que estaba entusiasmado y que sonaba como si hubiera estado cumpliendo con sus obligaciones desde hac¨ªa varias horas", dijo Bush.

El presidente norteamericano tampoco quiso revelar detalles sobre las personas implicadas en el golpe. Se limit¨® a comentar que Gorbachov estaba conversando con algunos de los presuntos involucrados y tratando de precisar el alcance de la conspiraci¨®n.

Una vez restablecida la constitucionalidad en la Uni¨®n Sovi¨¦tica, Bush anticip¨® una estrecha relaci¨®n con aquel pa¨ªs en el futuro inmediato. "Creo que es un buen d¨ªa para las relaciones sovi¨¦tico-norteamericanas", afirm¨®, "porque no creo que nunca apreciemos m¨¢s que ahora el miedo a lo que significa un golpe".

"Lo intentaron", a?adi¨®, "y fracasaron". "Prevalecieron la democracia y las reformas. Y esto es lo importante. As¨ª es que espero que nuestras relaciones ser¨¢n incluso mejor que hasta ahora. Gorbachov tiene que sortear todav¨ªa algunos problemas internos, pero, como yo le expliqu¨¦, y como ya le hab¨ªa dicho a Yeltsin, nosotros estamos dispuestos a hablar con los l¨ªderes de las rep¨²blicas y, por supuesto, estamos dispuestos a llegar a acuerdos con la propia Uni¨®n Sovi¨¦tica".

Bush destac¨® en su comparecencia ante los periodistas el hecho de que tanto Yeltsin como los presidentes de otras rep¨²blicas mantuvieron durante el golpe una actitud de "lealtad a la autoridad constitucional del presidente Gorbachov y de firme resistencia al golpe".

Tratando de disipar toda duda sobre una posible lucha de personalidades entre Gorbachev y Yeltsin, Bush se?al¨® ayer que "ambos est¨¢n trabajando juntos". La popularidad alcanzada por Yeltsin en Estados Unidos como resultado de esta crisis queda mejor reflejada en las palabras del presidente del Comit¨¦ de Inteligencia de la C¨¢mara de Representantes: "Este es el fin de era de Gorbachov y el comienzo de la era de Yeltsin. El pueblo ha hablado. Este hombre tiene carisma y valor".

George Bush inform¨® de su hist¨®rica conversaci¨®n con Gorbachov vestido con un impermeable azul cuando sal¨ªa de su casa para iniciar una tarde de pesca. Con su primicia sobre la suerte de Gorbachov, Bush pudo enmendar las carencias de informaci¨®n que ha demostrado a lo largo de toda la crisis. Menos de dos horas antes de su conversaci¨®n telef¨®nica con el l¨ªder sovi¨¦tico, Bush ve¨ªa a¨²n una gran incertidumbre en Mosc¨² y anunciaba movimientos de tropas hacia las rep¨²blicas b¨¢lticas.