Una firma textil derriba un edificio hist¨®rico
Una empresa de ropa de cama y mesa derrib¨® la pasada semana un edificio, sede durante un siglo de un taller marmolista, cuya fachada estaba protegida por el Plan General de Urbanismo. La Junta de Centro ha ordenado la paralizaci¨®n de las obras, aunque en el n¨²mero 20 de la calle de Concepci¨®n Jer¨®nima ya s¨®lo queda el solar. La fachada, realizada en m¨¢rmol y decorada con arcos y columnas, ha sido desmontada y enviada a un almac¨¦n de Vallecas.
D¨ªa Textil, SA, una empresa dedicada a la venta de ropa de cama y mesa, aprovech¨® el puente de la Paloma para derribar el local, pr¨®ximo al misterio de Asuntos Exteriores, que ocupaba M¨¢rmoles Molina desde finales del siglo pasado. Los escasos empleados que trabajaron aquel puente observaron el viernes 16 de agosto que la fachada hab¨ªa desaparecido y, en su lugar, colgaban unas lonas de pl¨¢stico azul.La empresa D¨ªa Textil ten¨ªa una licencia municipal para consolidar parte del edificio, cuya fachada estaba protegida por el Plan General de Urbanismo. Los t¨¦cnicos del Ayuntamiento de Madrid, que han ordenado la paralizaci¨®n de los trabajos, afirmaron ayer que la sociedad "se ha extralimitado de una manera llamativa". D¨ªa Textil, SA, despu¨¦s de derribar la parte interior del inmueble, que no est¨¢ protegida por el Plan, continu¨® con la fachada.
Se traspasa
El local de M¨¢rmoles Molina, que conoci¨® mejores ¨¦pocas, llevaba un a?o con el cartel de "Se traspasa". "La viuda de Molina, una se?ora de unos 70 a?os, iba a veces a la tienda, pero normalmente los clientes se encontraban con la puerta cerrada", contaba ayer Vicente D¨ªaz, propietario de una mercer¨ªa abierta en Concepci¨®n Jer¨®nima desde 1955, que recuerda el misterio que envolv¨ªa, en su infancia, el trasiego de la gente comprando l¨¢pidas y camafeos.Interesados en el local, comerciantes de la zona hablaron con la viuda de Molina, que paga el alquiler desde la fundaci¨®n del local marmolista. A los propietarios de una tienda de bisuter¨ªa cercana les llegaron a hacer una oferta de venta de 75 millones, con la condici¨®n de que respetaran la fachada: un escaparate muy original, pero excesivamente estrecho. "Nos hubiera gustado qued¨¢rnoslo, pero era muy caro invertir tanto dinero para no poder exponer la mercader¨ªa como querernos", explicaba Silvia Lago.
En una tienda de b¨¢sculas romanas, fundada en 1860 y cercana a la calle de Toledo, los empleados recordaban los pr¨®speros tiempos de Molina, har¨¢ unos 30 a?os. "La viuda apenas ven¨ªa, pero el escaparate estaba siempre limpio, con sus m¨¢rmoles y camafeos".
La semana anterior a las fiestas de la Paloma empezaron los trabajos para derruir el interior del edificio. Comerciantes y vecinos protestaron cuando vieron que el inmueble hab¨ªa desaparecido. Para los responsables municipales, la sede de M¨¢rmoles Molina "ten¨ªa inter¨¦s hist¨®rico para la ciudad y era significativo por su antig¨¹edad".
"La transgresi¨®n de las ordenanzas es clara", comentaron los t¨¦cnicos municipales. El concejal de Centro en funciones, Jos¨¦ Gabriel Astudillo, va a instar a la empresa a reponer la fachada, que fue desmontada piedra a piedra, a su lugar original.
Por su parte, el presidente del distrito, ?ngel Matanzo, amenaz¨® ayer desde su lugar de veraneo en Torremolinos (M¨¢laga) al funcionario de su Junta, militante adem¨¢s del PP, que firm¨® la licencia: "Ese se?or va a pagar lo que ha hecho", espet¨®.
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