Gorbachov disuelve el partido comunista y confisca sus bienes
"No considero posible para m¨ª continuar desarrollando la funci¨®n de secretario general del Comit¨¦ Central del Partido Comunista sovi¨¦tico y renuncio a esos poderes". Con esta frase, parte de un escueto comunicado firmado por Mijail Gorbachov, ¨¦ste romp¨ªa con casi un siglo de historia. Su abandono de la secretar¨ªa general del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica (PCUS) iba seguida de la disoluci¨®n del Comit¨¦ Central, su prohibici¨®n en el seno del Ej¨¦rcito y del KGB y de la orden de confiscar sus propiedades. La Uni¨®n Sovi¨¦tica entra as¨ª en una nueva era de su historia. Con el fracaso del golpe, se acab¨® de un plumazo con el r¨¦gimen que Lenin implant¨® en 1917. Al tiempo, la URSS aceleraba su proceso de desintegraci¨®n: Ucrania, la segunda rep¨²blica en poblaci¨®n (52 millones), el granero del pa¨ªs, declaraba su independencia y Yeltsin reconoc¨ªa a Estonia y Letonia, tras haberlo hecho en julio con Lituania.
Un locutor de la televisi¨®n sovi¨¦tica ley¨® poco antes de las nueve de la noche de ayer (hora peninsular espa?ola) el hist¨®rico decreto. Mija¨ªl Gorbachov, en una prueba m¨¢s de que el que da las ¨®rdenes hoy en la URSS es Bor¨ªs Yeltsin, encarg¨® al primer ministro ruso, Iv¨¢n Silalev, la formaci¨®n de un nuevo Gobierno de la URSS para sustituir al que, por acci¨®n o por omisi¨®n, se sum¨® a la intentona golpista.El presidente de la URSS solicit¨® al Parlamento que, en la reuni¨®n que celebrar¨¢ ma?ana, debata una moci¨®n de censura contra el Gabinete de Valent¨ªn P¨¢vlov, detenido el pasado jueves.
El partido comunista, s¨ªmbolo del poder omn¨ªmodo del r¨¦gimen surgido de la revoluci¨®n de 1917, se ha convertido los ¨²ltimos d¨ªas en blanco de las iras populares, con estatuas de sus notables derribadas, sus sedes asaltadas y sus archivos confiscados. La disoluci¨®n de un partido que se quedaba aceleradamente sin militantes era cuesti¨®n de tiempo.
Las canciller¨ªas occidentales acogieron con satisfacci¨®n la noticia de la desaparici¨®n del partido comunista y Francia decidi¨® solicitar la convocatoria urgente de una reuni¨®n de los ministros de Exteriores de la CE para analizar la situaci¨®n de un mundo nuevo en el que la URSS desaparece por momentos.
Pasa a la p¨¢gina 3 M¨¢s informaci¨®n en las p¨¢ginas 2 a 8 Editorial en la p¨¢gina 10
Conjura comunista
Rusia asume el control del poder sovi¨¦tico
La conjura comunista contra Gorbachov ha sido la puntilla final para el PCUS, que era abandonado a ritmo progresivamente creciente por sus militantes desde 1989, cuando el 27? congreso no fue capaz de dar respuesta a los retos planteados. La salida del PCUS hab¨ªa debilitado la "masa" de la organizaci¨®n, que de 19 millones de miembros hab¨ªa pasado a tener 16 millones, pero no hab¨ªa cristalizado en la aparici¨®n de nuevas fuerzas pol¨ªticas que fueran verdaderas alternativas. El ¨²ltimo intento de crear una alternativa ha sido la creaci¨®n del MRD, que dirige el ex ministro Shevardnaze.La lluvia de decretos y disposiciones promulgadas ayer en el Kreml¨ªn y la Casa Blanca culminaron con una orden de Bor¨ªs Yeltisn para que los archivos del Partido Comunista de la URSS y el KGB fueran confiscados con objeto de impedir la "destrucci¨®n ilegal de documentos".
Yeltsin orden¨® adem¨¢s el control sobre las comunicaciones gubernamentales con el fin de garantizar la seguridad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
