Lectores fantasma

C. A., Una modificaci¨®n sustancial de las relaciones editoriales entre Espa?a y Am¨¦rica es, a juicio de los nuevos administradores de Losada, lo que favorece ahora la exportaci¨®n desde Argentina a otros mercados. "En 1979 Espa?a export¨® 430 millones de d¨®lares", explica el gerente de Losada, "y en 1989, unos 230 millones. Esta baja tiene que ver con la crisis econ¨®mica de la llamada d¨¦cada perdida en Am¨¦rica Latina y tambi¨¦n con los costos europeos de Espa?a, que aumentaron un 300% a valores promedios. Esa brecha convierte al libro espa?ol en un lujo para Am¨¦rica. Entonces, las distribuidoras espa?olas se reconvierten aqu¨ª en productoras y se crean nuevas sociedades con editoriales latinoamericanas".

Una de esas nuevas sociedades es la que establece el espa?ol Fern¨¢ndez Reguera, actual propietario de Losada, con la REI. "Cay¨® la exportaci¨®n, pero el negocio para las empresas espa?olas ahora es la venta de derechos, fotolitos y tambi¨¦n la publicaci¨®n de autores locales. Es lo que hacen Planeta de Argentina, Taurus-Alfaguara, Alianza o Tusquets".

El plan editorial de Losada es reeditar los t¨ªtulos agotados de su Biblioteca cl¨¢sica y contempor¨¢nea y agregar novedades como El siglo de Pericles de Jean Jacques Maffre, Pretende tambi¨¦n resucitar la colecci¨®n Pensamiento vivo, en la que se hab¨ªan agotado las obras de Sarmiento,. Alberti o Maquiavelo y a las que se agregan ahora textos de Gramsci, Max Weber y Walter Benjamin.

En algunas librer¨ªas de Buenos Aires conviven ya las nuevas ediciones de los libros de Losada, de mayor tama?o, litograf¨ªa y dise?o moderno en las portadas, con las viejas, peque?as, de bolsillo. El gerente Alberto D¨ªaz asegura que "ning¨²n autor importante se perdi¨®" durante la agon¨ªa. El cat¨¢logo hist¨®rico se pudo recomponer "porque la mayor¨ªa de los t¨ªtulos son ya de dominio p¨²blico" y en algunos casos, como los de Jorge Amado, Neruda y Sartre, "se renovaron los derechos".

Los 20 poemas de amor y los Versos del capit¨¢n de Neruda, junto con los cuentos de Horacio Quiroga y las obras de Alejandro Casona, son los libros m¨¢s vendidos de esta nueva etapa. La demanda parece provenir de lectores fantasmas que llevaban a?os haciendo fila a las puertas de la editorial. A su vez, los j¨®venes descubren a poetas argentinos como Oliverio Girondo, del que Losada edit¨® ahora sus obras completas con pr¨®logo del poeta Enrique Molina y se convirti¨® en objeto de culto.