Todos quieren conocer a las nuevas caras de la antigua URSS

Viene de la primera p¨¢ginaEst¨¢ previsto que James Baker se re¨²na con el d¨²o Gorbachov-Yeltsin y con los nuevos responsables de Defensa y del KGB, pero tambi¨¦n que visite las rep¨²blicas b¨¢lticas, que participar¨¢n como miembros, lo que es comprensible, dado que su independencia ya es un hecho y que incluso ser¨¢n aceptadas en la Conferencia como nuevos pa¨ªses europeos.

M¨¢s novedoso resulta que James Baker viaje a Kazajst¨¢n, una de las cuatro rep¨²blicas que, al menos por ahora, no ha declarado su independencia y en cuyo territorio existen armas nucleares. Su colega alem¨¢n, Hans Dietrich Genscher, que adelant¨® un d¨ªa su llegada, tambi¨¦n viajar¨¢ al B¨¢ltico, pero la mayor¨ªa de los ministros no tendr¨¢ que desplazarse para, contactar con otras rep¨²blicas.

La delegaci¨®n sovi¨¦tica estar¨¢ integrada por representantes de todas ellas. A¨²n ayer no estaba claro qu¨¦ quiere decir "todas". Georgia, por ejemplo, no ha aceptado la invitaci¨®n, pero por el momento parece que la mayor¨ªa tiene inter¨¦s en estar presente en un foro internacional tan importante como la CSCE.

La Conferencia, por otra parte, ha adquirido una dimensi¨®n especial. Lo que pod¨ªa haber sido una reuni¨®n casi de tr¨¢mite sobre los derechos humanos se ha convertido en un acontecimiento excepcional.

Los ministros de Asuntos Exteriores tienen ante s¨ª, con una virulencia casi olvidada en Europa, el problema del derecho a la autodeterminaci¨®n de los pueblos y el respeto a las minor¨ªas.

Centro de las discusiones

Yugoslavia y el desmembramiento de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, los dos puntos m¨¢s candentes de la pol¨ªtica internacional, se convertir¨¢n as¨ª en el centro de las discusiones. La perspectiva de migraciones masivas dentro del territorio europeo, algo de lo que nadie se acordaba ya, vuelve a aparecer ante los civilizados ojos de unos asombrados diplom¨¢ticos.

Y si los ministros optan por suavizar los tonos, la Conferencia paralela de organismos no gubernamentales que se inaugur¨® ayer no dejar¨¢ de cargar las tintas. Dentro de los casi ir¨®nicos cambios que ocurren en la antigua URSS, las actividades se celebran nada menos que en el edificio que alberg¨® al Comit¨¦ Central del PCUS, el santa sanctorum en el que los ide¨®logos del marxismo-leninismo hicieron durante a?os la ex¨¦gesis del pensamiento comunista.