"Si el Partido Dem¨®crata no cambia su mensaje, nunca regresar¨¢ al poder"

Paul Tsongas no es todav¨ªa muy popular en Estados Unidos, pero ha sido uno de los m¨¢s claros al exponer que si su partido no cambia la imagen izquierdista que ofrece actualmente, nunca volver¨¢ a la Casa Blanca. ?l pretende hacerlo en las elecciones de 1992 convenciendo a los norteamericanos de que la pol¨ªtica de George Bush puede llevar a este pa¨ªs por el mismo camino que la Uni¨®n Sovi¨¦tica.Su trayectoria no es la de un conservador -form¨® parte de los Cuerpos de Paz y vot¨® en el Senado contra la designaci¨®n de Alexander Haig como secretario de Estado y contra la ayuda militar a El Salvador-, pero al mismo tiempo cree que los dem¨®cratas no pueden aparecer hoy ante los norteamericanos como los enemigos de los empresarios. En una conversaci¨®n sostenida con este peri¨®dico durante un recorrido electoral por el Estado de New Hampshire, el ex senador Tsongas se presenta como un firme defensor de la tradici¨®n de su partido a favor de los derechos civiles, pero tambi¨¦n como un convencido partidario de la competencia y de la iniciativa privada.

Pregunta. Hay quien piensa que debe ser usted muy valiente o muy loco para competir por la presidencia cuando George Bush goza de su mejor momento de popularidad.

Respuesta. Ya he competido antes contra otra gente que se supon¨ªa imbatible; as¨ª es que eso no me importa mucho. Mi prop¨®sito en esta campa?a es educar a mi pa¨ªs y devolverle la esperanza para hacer frente a los problemas econ¨®micos. Yo no empec¨¦ la campa?a mirando las encuestas; pero, incluso si miramos las encuestas, el hecho es que, aunque Bush es personalmente popular, dos tercios de los americanos creen que estamos en la direcci¨®n equivocada. La gente est¨¢ preocupada por el futuro de este pa¨ªs. La pregunta es: ?son capaces los dem¨®cratas de convencer al pueblo norteamericano de que nosotros podemos ofrecer una mejor alternativa? ?se va a ser nuestro reto.

La gran oportunidad

P. ?En qu¨¦ temas cree usted que Bush es m¨¢s vulnerable?

R. En lo econ¨®mico. Pero hay algo m¨¢s: Bush ser¨¢ derrotado por toda la gente que no pertenece a la ¨¦lite de este pa¨ªs, por la gente afectada por temas como los derechos de las mujeres, los derechos civiles, el medio ambiente, la educaci¨®n. Todos estos temas son la gran oportunidad de los dem¨®cratas. Pero el m¨¢s importante de todos es la econom¨ªa. Ahora que la econom¨ªa tiene problemas, nosotros tenemos una gran oportunidad de ofrecer un gran programa, con la premisa de que los dem¨®cratas, que siempre hemos sido vistos como enemigos de hacer negocios, como los enemigos de la iniciativa privada, tienen que cambiar. Eso es lo que yo estoy tratando de cambiar en mi partido.

P. ?Usted no cree que exista una grave crisis en el Partido Dem¨®crata?

R. Tenemos que decidir qu¨¦ rumbo tomamos. Yo creo que en esta campa?a vamos a tener una buena oportunidad para decidirlo, porque vamos a encontrar gente con programas populistas y contrarios a la iniciativa privada, y otros, partidarios de poner el ¨¦nfasis en los econ¨®micos. Si el que gana la candidatura es un proiniciativa privada tendremos oportunidad de batir a Bush, pero si el que gana es un antiiniciativa privada, Bush seguir¨¢ siendo imbatible. Yo me pregunto: ?cu¨¢ntas veces tendremos que perder para darnos cuenta de esto?

P. ?Se atreve usted a pronosticar por cu¨¢nto tiempo m¨¢s estar¨¢n los dem¨®cratas apartados del poder?

R. No creo que estemos por tanto tiempo como hemos estado. Pero si no cambiamos el mensaje, nunca volveremos al poder. Miren el ejemplo del Partido Laborista del Reino Unido: mientras ha estado dirigido por los puristas, por los ide¨®logos, ha estado fuera del poder; en la medida en que adopta posiciones m¨¢s centristas, aumentan sus posibilidades.

P. ?En qu¨¦ sector del Partido Dem¨®crata se sit¨²a usted?

R. Yo soy un liberal, pero un liberal partidario de la iniciativa privada. Yo soy un liberal en todo el contenido pol¨ªtico de ese concepto, pero no en lo econ¨®mico. Yo tengo una fuerte convicci¨®n a favor de la iniciativa privada, de la competencia.

P. ?Est¨¢ usted a favor de la pena de muerte?

R. S¨®lo para los casos de cr¨ªmenes contra la sociedad, pero no en los casos de cr¨ªmenes de individuos contra individuos.

P. ?Qu¨¦ opina del aborto?

R. Estoy a favor de la libre decisi¨®n.

P. Usted ha dicho que la guerra fr¨ªa ha terminado, pero que el vencedor no es Estados Unidos, sino Jap¨®n. ?Qu¨¦ quiere usted decir?

R. Mientras EE UU y la URSS se desafiaban mutuamente con enormes inversiones militares, Jap¨®n, Alemania, Taiwan, Corea del Sur desarrollaban una enorme potencia industrial y concentraban sus presupuestos en educaci¨®n, ciencia, bienes de consumo.

Ahora nos encontramos a la URSS en disoluci¨®n, y a Estados Unidos, con una deuda monumental, y Jap¨®n est¨¢ comprando Am¨¦rica. Con esto no quiero criticar a Jap¨®n.

Tenemos enormes problemas de deuda, de d¨¦ficit comercial; el sistema educativo no funciona. Entonces, parte de mi obligaci¨®n, cuando hablo de las prioridades econ¨®micas, es hacerle comprender al pa¨ªs que nuestra amenaza no son los sovi¨¦ticos, sino la econom¨ªa.

P. ?Por eso dice usted que ahora la amenaza es Jap¨®n?

R. No podemos criticar a Jap¨®n; ellos hacen lo que tienen que hacer. Somos nosotros los que lo tenemos que hacer mejor.

P. ?Qu¨¦ tiene que cambiar en la pol¨ªtica norteamericana despu¨¦s de ?a ca¨ªda de la Uni¨®n Sovi¨¦tica?

R. Lo primero que se ve es que la idea de mantener soldados en Alemania no tiene sentido. Lo segundo es que nos vamos dando cuenta de que tenemos que ayudar a la Uni¨®n Sovi¨¦tica a reconstruir su econom¨ªa. Yo creo que la mayor¨ªa de la gente est¨¢ ya a favor de esa ayuda. Yo no soy un aislacionista.

Yo creo que Occidente no puede abandonar a la Uni¨®n Sovi¨¦tica en estos momentos, y por eso he propuesto dedicar 2.000 millones de d¨®lares del presupuesto de la OTAN para ayudar a. los sovi¨¦ticos en una forma similar a la del Cuerpo de Paz.

Israel y los ¨¢rabes

P. ?Cual es su propuesta para Oriente Pr¨®ximo?

R. He propuesto un mercado com¨²n para Oriente Pr¨®ximo. Yo creo que la ¨²nica manera de que Israel y los pa¨ªses ¨¢rabes negocien es si tienen relaciones econ¨®micas, Y es natural, porque tenemos un Israel muy tecnologizado, y, los pa¨ªses ¨¢rabes, con grandes recursos naturales y mano de obra. Mi idea es que, si se crea una relaci¨®n econ¨®mica entre los dos lados, los pa¨ªses ¨¢rabes van a estar interesados en que Israel sobreviva, y viceversa.