Un 'guardia' de Edelweiss se retracta de sus declaraciones sobre pr¨¢cticas homosexuales
Javier Marcos Mart¨ªnez, uno de los dirigentes de la secta Edelweiss, admiti¨® ayer ante el tribunal que el m¨¦todo de ense?anza de la secta inclu¨ªa procurar que los ni?os se alejasen de sus padres y del entorno familiar, pero neg¨® que la tercera fase de las ense?anzas fuese introducir a los ni?os en el tema del sexo, como declar¨® en el sumario.
En la jornada de ayer, la fiscal del caso puso en evidencia las graves contradicciones entre tres declaraciones del testigo Javier Marcos Mart¨ªnez, -la primera realizada ante la polic¨ªa y las otras dos ratificadas en presencia del juez y asistido de abogado-, y lo declarado ayer ante el tribunal.En los extractos de declaraci¨®n le¨ªdas por la fiscal, Javier Marcos, a la saz¨®n uno de los guardias de hierro, aseguraba tras su detenci¨®n que hab¨ªa querido "abandonar los tocamientos y masturbaciones que practicaban en Edelweiss con los ni?os", y las relaciones homosexuales que mantuvo con Eddie y la mayor¨ªa de los dem¨¢s procesados. En las mismas afirmaba que ¨¦l tuvo su primera experiencia homosexual con Carlos de los R¨ªos y que Eddie hab¨ªa mantenidos relaciones homosexuales "con casi la mayor¨ªa de los integrantes de Edelweiss".
Seg¨²n dichas declaraciones, Eddie controlaba el grupo y cuando ¨¦l no estaba lo hac¨ªa Carlos de los R¨ªos, siendo Ignacio de Miguel "el tercero en la jerarqu¨ªa". En Edelweiss hab¨ªa distintos grupos, tales como jabatos, iniciados, fieles y senadores, adem¨¢s de los guardias de hierro. Tambi¨¦n declar¨® entonces que en la selecci¨®n de los menores "se preocupaban de la belleza y del aspecto f¨ªsico".
Todas estas afirmaciones de entonces fueron rectificadas por Javier Marcos, quien sostuvo que nunca tuvo constancia de relaciones homosexuales dentro del grupo y que antes de declarar ante el juez de instrucci¨®n la polic¨ªa le llam¨® para que declarara lo mismo "y as¨ª no tendr¨ªa ning¨²n problema". Respecto a una declaraci¨®n indagatoria ante el juez dijo que hab¨ªa tenido problemas con un abogado sinverg¨¹enza que le recomend¨® que mantuviese lo que hab¨ªa dicho.
Grupo de adolescentes
El procesado Juan Iriarte declar¨® que en Edelweiss alguna vez se hablaba de sexo, "lo mismo que en cualquier grupo de adolescentes" y agreg¨® que, respecto a ¨¦l, alguien pudo interpretar como relaci¨®n sexual "que le pusiera a alg¨²n compa?ero la mano sobre el hombro". Iriarte y otro de los procesados, Jos¨¦ Garrido Gil, reconocieron que en Edelweiss se practicaba el "juego de la verdad", pero no recordaban que en el mismo saliese el tema de la sexualidad.
El viernes se reanudar¨¢ el juicio con el comienzo de la prueba testifical. A ella han sido convocados 84 testigos entre los que se cuentan los entonces ni?os presuntamente corrompidos, que ascienden a 75 y algunos familiares de ¨¦stos que cursaron las denuncias.
Algunos miembros de la acusaci¨®n han asegurado que varias de las antiguas v¨ªctimas de Edelweiss comparecer¨¢n a acusar a sus presuntos corruptores, aunque muchos otros no lo har¨¢n. Algunos de los entonces ni?os hoy est¨¢n casados y en algunos casos sus c¨®nyuges ignoran su vinculaci¨®n al esc¨¢ndalo.
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