El "n¨²mero dos" de Edelweiss se desmorona y confiesa sus relaciones homosexuales

Carlos de los R¨ªos, considerado el lugarteniente del l¨ªder de Edelweiss, Eduardo Gonz¨¢lez Arenas, Eddie, se desmoron¨® ante el tribunal y confes¨® haber mantenido relaciones homosexuales con otros miembros de la secta y con menores de edad. Concluida la prueba testifical en la que 23 antiguos ni?os del grupo han acusado a Eddie y a sus guardias de hierro de someterles a servicios sexuales, De los R¨ªos dijo sentirse "atormentado" y se desdijo de la declaraci¨®n de d¨ªas atr¨¢s en la que neg¨® cualquier atisbo de homosexualidad en Edelweiss.

Cuando a Carlos de los R¨ªos le interrogaron el pasado 24 de septiembre sobre comportamientos homosexuales dentro de Edelweiss, respondi¨® que nunca hab¨ªa visto nada ni tampoco hab¨ªa observado "ning¨²n comportamiento anormal o sexualmente desviado de Eddie". En la misma declaraci¨®n, De los R¨ªos neg¨® otras acusaciones, como la de haber "intentado penetrar" a F.R.F., haber masturbado a R.P., haber impartido charlas de iniciaci¨®n a la homosexualidad a L.D. e incluso haberle desvelado a D.P. que las historias de planetas "eran una farsa".Ayer, despu¨¦s de que 23 de los antiguos ni?os de Edelweiss desfilasen ante el tribunal acusando a Eddie y a los otros mandos de la secta de iniciarles en las relaciones homosexuales, Carlos de los R¨ªos se decidi¨® a cantar de plano, sin ninguna pretensi¨®n de beneficiarse, seg¨²n dijo. En su nueva declaraci¨®n, afirm¨® que en Edelweiss las relaciones homosexuales con ni?os eran "normales y naturales, algo habitual".

Aunque asegur¨® que nunca hab¨ªa tenido relaciones homosexuales con Eddie, dijo que "hubiese sido un honor si Eddie me hubiera hecho m¨¢s caso". "No se lo hizo conmigo, pero me hubiera gustado estar m¨¢s cerca del l¨ªder, del mes¨ªas", a?adi¨® en tono crispado

Obligado a prostituirse

De los R¨ªos no quiso inculpar a ninguno de los otros procesados y centr¨® sus acusaciones en Eddie, quien le oblig¨®, seg¨²n dijo, a robar 100.000 pesetas con las que viajaron a Italia. "En Roma, Eddie me oblig¨® a prostituirme con un se?or que nos daba casa y comida"."Eddie siempre buscaba demostrar que era el m¨¢s fuerte y el que m¨¢s ni?os se pod¨ªa llevar a la cama. Por eso, cuando descubri¨® que yo ten¨ªa una relaci¨®n de amistad profunda con uno de los procesados, me oblig¨® a tener nuevas relaciones para que todos supieran quien mandaba".

De los R¨ªos dijo haber mantenido divergencias con Eduardo Gonz¨¢lez Arenas, Eddie, por "verse obligado" a mantener relaciones con ni?os y por motivos econ¨®micos,.

Asimismo, De los R¨ªos neg¨® haber sido el segundo en Edelweiss, -tal como le han se?alado todos los testigos y algunos de los procesados-, ya que "el ¨²nico que toma decisiones en el grupo era Eddie". "Harto, cansado y desmoronado", De los R¨ªos lament¨® haber perdido diez a?os de su vida con una historia que atribuy¨® a la aparici¨®n de Eddie cuando a los 12 a?os qued¨® hu¨¦rfano de padre, su madre estaba pr¨¢cticamente ciega y Eddie se le present¨® "como un salvador".

El perito y catedr¨¢tico de Psiquiatr¨ªa Enrique Rojas ilustr¨® al tribunal, a propuesta de un defensor, sobre la influencia de los l¨ªderes de las sectas. El juicio se reanudar¨¢ ma?ana con los informes finales.